El súbito ascenso de Héctor Velázquez, Campeón mexicano con Red Sox
El pitcher mexicano consiguió su primer anillo de una Serie Mundial tras imponerse ante Los Angeles Dodgers, aunque no tuvo participación.
Los Angeles /
Su carrera lo tenía como miembro de la rotación abridora de los Piratas de Campeche y los Acereros de Monclova, pero de lanzar en 2016 en la Liga Mexicana, una campaña después Héctor Velázquez estaba en el montículo del Fenway Park con la camisola de los Red Sox.
El cambio fue súbito. Después de haber estado siete años en la LMB, seis con los Piratas y una con los Acereros, le hablaron para que en febrero de 2017 se integrara a los entrenamientos de los Medias Rojas para probar suerte. Él venía de un sólido invierno en la Liga del Pacífico donde fue nombrado Pitcher del Año y eso fue lo que convenció a los de Massachusetts de darle una oportunidad.
En dos años pasó de ser un relevista que subió a Grandes Ligas y también bajó a sucursales, a ser un lanzador que se quedó toda la temporada en la Gran Carpa, sumando 47 apariciones, ocho como abridor, cerrando con siete victorias.
Aun así, no vio acción en los Playoffs con el equipo, ya que la escuadra apostó a tener un line up enfocado en el bateo, bajando a solo 11 lanzadores, lo que le quitó la oportunidad de jugar. Sin embargo, estuvo en la celebración del equipo, levantó el título de Grandes Ligas y espera, pronto, su anillo de Campeón.
“Fue una buena temporada aunque no me conformo con eso, me voy a seguir preparando para el próximo año tener mejores oportunidades y poder dar mejores resultados”, comentó el derecho, quien fue acompañado por su familia en la celebración en el campo del Dodger Stadium.
En menos de dos años pasó de lanzar por el equipo de México en la Serie del Caribe a estar en un vestidor ligamayorista celebrando el campeonato de MLB y con 29 años de edad alcanzó algo que, quizá en 2016, se veía muy lejos.
“La verdad siempre soñé y siempre me imaginé en estar en un momento como este, que me tocara ganar la Serie Mundial, sí lo visualicé y ahora estoy aquí”, sentenció.
El nacido en Ciudad Obregón, Sonora, no tendrá vacaciones, ya que fue informado que integrará la selección de MLB que viajará a Japón en noviembre para participar en una serie de juegos de exhibición.
El cambio fue súbito. Después de haber estado siete años en la LMB, seis con los Piratas y una con los Acereros, le hablaron para que en febrero de 2017 se integrara a los entrenamientos de los Medias Rojas para probar suerte. Él venía de un sólido invierno en la Liga del Pacífico donde fue nombrado Pitcher del Año y eso fue lo que convenció a los de Massachusetts de darle una oportunidad.
En dos años pasó de ser un relevista que subió a Grandes Ligas y también bajó a sucursales, a ser un lanzador que se quedó toda la temporada en la Gran Carpa, sumando 47 apariciones, ocho como abridor, cerrando con siete victorias.
Aun así, no vio acción en los Playoffs con el equipo, ya que la escuadra apostó a tener un line up enfocado en el bateo, bajando a solo 11 lanzadores, lo que le quitó la oportunidad de jugar. Sin embargo, estuvo en la celebración del equipo, levantó el título de Grandes Ligas y espera, pronto, su anillo de Campeón.
“Fue una buena temporada aunque no me conformo con eso, me voy a seguir preparando para el próximo año tener mejores oportunidades y poder dar mejores resultados”, comentó el derecho, quien fue acompañado por su familia en la celebración en el campo del Dodger Stadium.
En menos de dos años pasó de lanzar por el equipo de México en la Serie del Caribe a estar en un vestidor ligamayorista celebrando el campeonato de MLB y con 29 años de edad alcanzó algo que, quizá en 2016, se veía muy lejos.
“La verdad siempre soñé y siempre me imaginé en estar en un momento como este, que me tocara ganar la Serie Mundial, sí lo visualicé y ahora estoy aquí”, sentenció.
El nacido en Ciudad Obregón, Sonora, no tendrá vacaciones, ya que fue informado que integrará la selección de MLB que viajará a Japón en noviembre para participar en una serie de juegos de exhibición.