Desde el metro hasta la puerta del estadio, hubo reventa en la nueva casa de los Diablos

Para el negocio de la reventa no hay límites. Desde que el famoso tren naranja llega a la estación Puebla de la línea café, los revendedores comienzan con la oferta de los boletos para la inauguración de la nueva casa de los Diablos Rojos, el Estadio Alfredo Harp Helú.

Ante la presencia de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, decenas de hombres y mujeres abordan a los aficionados para ofrecer boletos de 700 pesos. Conforme se avanza en la estación del Sistema de Transporte Colectivo Metro, los revendedores siguen el negocio e incluso se ubican a lo largo de las escaleras para salir de dicho lugar.

Durante todo el trayecto, unos 200 metros, las ofertas no cesan. Incluso, mujeres de la tercera edad con bastones y andaderas también realizan el ofrecimiento.

Ya en la explanada principal, muy pocos elementos de Policía Bancaria e Industrial salvaguardando a miles de seguidores, sin embargo, eso no intimidó a los revendedores que entre las multitudes dieron continuidad al negocio.