Seattle doblega a Los Ángeles en un partido que se definió en el último instante

Drama total se vivió en el Century Link Field, casa de los Seattle Seahawks (4-1), equipo que supo sufrir para derrotar 29-30 a Los Ángeles Rams (3-2) en duelo de Jueves por la Noche.

La Semana 5 de la temporada regular de la NFL no pudo tener mejor comienzo con dos equipos jugándose sus posibilidades en una División Oeste que tiene en la punta a los invictos San Francisco 49ers.

Los Rams se fueron al frente con par de goles de campo de Greg Zuerlein, quien al final se convertiría en el villano de la historia al fallar una patada que pudo significar la victoria.

Seattle respondió con un pase de anotación de Russell Wilson para Tyler Lockett, quien hizo una recepción memorable para darle la vuelta al partido. 

El novato D.K. Metcalf amplió la ventaja con otra atrapada de touchdown en la que hizo ver mal a la secundaria de los visitantes.

Sobre el final de la primera mitad los Rams se metieron de vuelta al juego gracias a Cooper Kupp, quien capturó un balazo salido del brazo de Jared Goff. 

El propio Goff movió a su equipo al regreso del descanso, preparando el terreno para que Todd Gurley anotara por la vía terrestre, regresando la ventaja a los californianos.

Otra vez Wilson sacó la casta y encontró a David Moore, quien se quitó fácilmente su marca y se metió caminando a la zona de anotación. 

Otra vez los visitantes contestaron con otro acarreo de Gurley. Los Rams fallarían una conversión de dos puntos que resultaría clave.

En el último cuarto, los Seahawks se acercaron con gol de campo de Jason Myers, mientras que Zuerlein volvió a acertar por parte de angelinos.

Wilson volvió a tomar el ovoide y condujo a su ofensiva todo el terreno hasta encontrar a Chris Carson en la tierra prometida para tomar una distancia definitiva.

Con suficiente tiempo, Jared Goff empezó a atinar una serie de pases que los colocaron en buena posición para que Greg Zuerlein ganara el partido, pero el siempre confiable Legatron falló a la hora buena y así Wilson no tuvo más que poner rodilla en tierra para asegurar la victoria.

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