Tom Flores, el coach mexicano que conquistó a los Raiders

Tom Flores es uno de los principales encargados de que la National Football League (NFL) e hispanoamérica tengan un lazo tan estrecho. Pues el mexicano logró crear un vínculo con el público latinoamericano tanto en su etapa como jugador, pasando a ser entrenador asistente y finalmente levantando dos títulos de Super Bowl como entrenador en jefe.

El vínculo mexicano de Tom Flores

A pesar de que Tom Flores nació en Sanger, California, es hijo de padre duranguense que migró al estado soleado cuando tenía 12 años y de madre nacida en California pero cuyas raíces se remontan al estado de Jalisco. Pese a estar orgulloso de sus orígenes, Flores está convencido de que fue contratado por los equipos de la NFL por "su talento y no por pertenecer a una minoría", según relató a LA Times.

“No era algo importante cuando empecé. Nunca pensé en ello. Jamás imaginé que me habían contratado por mi origen étnico. Me contrataron por lo que podía hacer en el campo como jugador y como entrenador. Todavía lo creo así”.

Previo a jugar en la NFL, Tom fue profesor de secundaria, sin embargo, al obtener una oportunidad en el futbol americano no dudó en aprovecharla para hacer historia.

Su impacto en la NFL

Tom Flores comenzó su carrera en la NFL en 1960 cuando superó a 10 compañeros para convertirse en el quarterback titular de los Oakland Raiders. No obstante, en la temporada 1962 tuvo que superar una tuberculosis y mientras estuvo alejado de los emparrillados vendió fuegos artificiales, obtuvo una licencia como vendedor de bienes raíces y trabajó como periodista deportivo para el Oakland Tribune.

El mexicano recuperó la titularidad en 1963, pero para 1966 fue enviado a los Buffalo Bills. Tom Flores conquistó su primer anillo de Super Bowl como quarterback suplente de los Kansas City Chiefs en 1969 al ganar la edición IV a los Minnesota Vikings. Tras su retiro como jugador, el californiano impartió sus conocimientos en el banquillo de los Buffalo Bills antes de ser contratado de nueva cuenta por los Oakland Raiders.

Flores fungió como entrenador de receptores abiertos de 1972 a 1978, ganando un Super Bowl bajo el liderazgo de John Madden en 1976, cuando los Raiders se impusieron a los Vikings en la edición XI de la Fiesta Grande. Tres años después, Tom asumió el cargo de entrenador en jefe y sería el arquitecto de algunas de las mejores temporadas en la historia del equipo hasta 1987.

Escribiendo historia

Durante las nueve temporadas que dirigió a los Raiders, Tom Flores acumuló un récord de 83-53, 8-3 en Playoffs y se convirtió en el primer head coach en pertenecer a una minoría en ganar un Super Bowl. El equipo del mexicano logró imponerse en el Super Bowl XV ante los Philadelphia Eagles y en el Super Bowl XVIII a los Washington Redskins.

Las raíces latinas de Flores se cruzaron con las de un prometedor jugador también con orígenes mexicanos: Jim Plunkett, quien fue el quarterback titular al momento que los Raiders ganaron los títulos de Super Bowl con Tom como entrenador. Dentro de un México donde los Dallas Cowboys y los Pittsburgh Steelers ya dominaban en cuestión de número de aficionados, esta dupla latina logró enamorar a miles en el territorio nacional.

Tom no solo se convirtió en el primer entrenador hispano en ganar un Super Bowl, sino que fue el primero en ganar anillos como jugador, entrenador asistente y entrenador en jefe, hazaña que sólo ha podido replicar un mítico como Mike Ditka. Del mismo modo, fue el primer hispano en convertirse en gerente general y presidente de un equipo, cuando decidió aceptar la oferta de los Seattle Seahawks, equipo al cual también dirigió de 1992 a 1994.

Tom Flores terminó su carrera con un récord de 105-90 y ganó el 72.7% de sus juegos en Postemporada, fue nombrado entrenador del año en 1982 por la United Press International y la Football Writers Association. Después de vencer a las Eagles en el Super Bowl XV, el entrenador de la línea ofensiva de los Raiders, Sam Boghosian, quien tuvo un origen similar al del mexicano, se acercó y le dijo: "Nada mal para un par de recolectores de uvas. Somos campeones del mundo".

Flores fue presentado en el Salón de la Fama de la NFL en 2021 donde le agradeció a su esposa, familia y amigos antes de sentenciar con: "Este es un día muy emotivo para mí. He sido bendecido con una gran vida, haciendo el trabajo que me gusta, con gente a la que quiero y adoro. Siempre fui feliz en el mundo del futbol americano, y ahora, gracias a este honor, seré parte de él para siempre”.