Rayados quiere evitar el canto del Gallos
El Monterrey requiere volver a ganar en casa ante un Querétaro que nunca ha vencido a los albiazules como visitante.
Monterrey, Nuevo León /
Los Rayados necesitan urgentemente de un triunfo que los mantenga en la lucha por los puestos de Liguilla. El conjunto albiazul se mantuvo por segunda semana consecutiva en el octavo puesto de la clasificación con 15 puntos, pero puede ser la fortuna no los acompañe una tercera semana, si ellos no hacen lo que les corresponde en la cancha.
En palabras de Antonio Mohamed y de los propios jugadores, el Monterrey tocó fondo tras la derrota en Torreón con Santos, por lo que es imperativo que regresen al camino del triunfo en casa cuando reciban a Querétaro.
Gallos Blancos es un rival impredecible para la Pandilla, pues recientemente los eliminó de la Copa MX en los octavos de final en serie de penales, sin embargo nunca en su historia los queretanos han logrado vencer a los regios como visitantes en la Liga, hegemonía que tratarán de cortar este sábado en el Estadio BBVA.
Los pupilos del Turco al parecer juegan contra más de un adversario cuando les toca ser anfitriones, pues además del equipo rival, también deben sobreponerse al mal estado del terreno de juego en su estadio y a la presión que ejerce su afición en la tribuna por la falta de buenos resultados.
En palabras de Antonio Mohamed y de los propios jugadores, el Monterrey tocó fondo tras la derrota en Torreón con Santos, por lo que es imperativo que regresen al camino del triunfo en casa cuando reciban a Querétaro.
Gallos Blancos es un rival impredecible para la Pandilla, pues recientemente los eliminó de la Copa MX en los octavos de final en serie de penales, sin embargo nunca en su historia los queretanos han logrado vencer a los regios como visitantes en la Liga, hegemonía que tratarán de cortar este sábado en el Estadio BBVA.
Los pupilos del Turco al parecer juegan contra más de un adversario cuando les toca ser anfitriones, pues además del equipo rival, también deben sobreponerse al mal estado del terreno de juego en su estadio y a la presión que ejerce su afición en la tribuna por la falta de buenos resultados.