Parecía que jugaba México’; se cumplen 20 años del Cruz Azul épico en Libertadores

Óscar Pérez recordó lo que significó jugar la Final del ante Boca Juniors y cambiar de casa para jugar en el Azteca con más gente.

Cruz Azul se quedó a nada de levantar la Copa Libertadores ante Boca juniors (FOTO: MEXSPORT)

Recién consumado el título de Liga por el que Cruz Azul esperó 23 años, el portero Óscar Pérez recordó el significado de la Final que la Máquina jugó ante Boca Juniors en la Bombonera en la Copa Libertadores del 2001, un partido épico del que este lunes se cumplen dos décadas.

El Conejo fue parte del campeonato reciente del cuadro cementero como preparador de porteros, y en aquella Final de Libertadores también participó, como guardameta titular, por lo que fue quien sufrió con más dolor la derrota en la tanda de penales.

Pese a ello, el guardameta aseguró que a 20 años sigue siendo épico el significado de esa gesta, pues Cruz Azul salió aplaudido de la Bombonera por la afición local, cuando los equipos mexicanos apenas tenían tres años de experiencia en la Libertadores.

Cruz Azul, en negociaciones con el Quick Mendoza para tener a su primer refuerzo

“Dicen que del segundo lugar ya nadie se acuerda, pero en este caso sí porque fue Cruz Azul, porque generó algo distinto, por el interés por la gente, los estadios se llenaban, se quedaba gente afuera”, mencionó en entrevista con Mediotiempo.

“La gente se compenetró con el equipo que parecía que estaba jugando la Selección Mexicana, por los estadios llenos. Empezamos jugando en el Estadio Azul y la gente se quedaba afuera. La directiva arregló para ir al Estadio Azteca y eran llenos seguros. Eso no lo volví a ver con otro equipo. Lo que generó esa vez Cruz Azul fue diferente a todas las otras Libertadores”.

‘ESO MARCÓ UN ANTES Y UN DESPUÉS’

Para el hoy entrenador de porteros en el club cementero, aquella edición de la Copa Libertadores fue un parteaguas en el futbol mexicano, ya que la buena imagen que dejaron provocó que el interés de la afición en todo el país volteara a ver las competencias de Sudamérica.

“Sin duda ese torneo en especial marcó un antes y un después en el interés de la gente, inclusive del jugador, porque es un torneo muy interesante e importante”, señaló Pérez.

Al Conejo incluso le sirvió para después jugar un papel protagonista en la Selección Mexicana, previo a la Copa del Mundo Corea-Japón 2002.

“Nadie se guardó nada y eso nos dejó más tranquilos, no satisfechos porque uno siempre quiere ganar, pero el equipo estuvo consciente de que había hecho algo importante para el país, para Cruz Azul, y es algo que seguimos hablando de esa Libertadores que fue una de las más bonitas, si no que la más bonita que ha vivido el futbol mexicano”.

EL CAMINO DE LA MÁQUINA A LA FINAL

Cruz Azul inició el torneo en el Grupo 7 junto a Sao Caetano de Brasil, Defensor Sporting de Uruguay y Deportivo Olmedo de Ecuador. Se llevó el liderato del sector con 13 unidades, con 4 triunfos, 1 empate y 1 derrota.

En los Octavos de Final dejaron fuera a Cerro Porteño de Paraguay. La víctima en Cuartos fue River Plate, cuando la Máquina ya jugaba como local en el Estadio Azteca, y en las Semifinales, en un gran juego en Argentina, eliminaron a Rosario Central para meterse a la final ante Boca Juniors, que entonces tenía entre sus filas a Juan Román Riquelme, Walter Gaitán, Marcelo Delgado, Chaco Giménez, entre otros.

“Lo recordamos con emoción, y satisfechos de haber hecho un gran torneo, lamentablemente no lo pudimos culminar siendo campeones, pero quedan viajes, vivencias, roces, otro tipo de público, canchas no tan buenas, es un todo que al jugador lo enriquece y te ayuda a crecer”.



NOTAS MÁS VISTAS