Si hubiera existido VAR: El egipcio que le 'robó' a España ante la local Corea en 2002

El conjunto ibérico fue eliminado por los locales en Cuartos de Final en un partido lleno de flagrantes errores arbitrales, todos en contra de la Roja.

Fernando Hierro y Joaquín encarando a Gamal El Ghandour, el silbante egipcio del robo. (Mexsport)

Si hay un partido que ejemplifica perfectamente la necesidad del VAR sin duda es el de los Cuartos de Final del Mundial 2002 entre el local Corea del Sur y España, que terminó con polémica eliminación de la Roja en penales y una muy sospechosa clasificación de los coreanos a Semifinales. Lo anterior porque fue un partido plagado de flagrantes errores arbitrales, todos en contra de los europeos.

Desde goles anulados incorrectamente, fueras de lugar inexistentes, faltas claras a favor de los ibéricos que ni de broma se marcaron, un juego agresivo por parte de los coreanos y totalmente permisivo por los árbitros. Para rematar, en la tanda de penales (luego de que el juego terminó 0-0) no repitieron un cobro en el que el guardameta coreano se adelantó casi un metro de la línea para tapar el disparo.

¿QUIÉN FUE EL ÁRBITRO DEL ESPAÑA-COREA?

El encuentro se disputó el 22 de junio del 2002 en el Gwangju World Cup Stadium de la ciudad de Gwangju, Corea del Sur. Los árbitros fueron: Gamal El Ghandour de Egipto como juez central y los asistentes Ali Tomusange de Uganda y Michael Ragoonath de Trinidad y Tobago; los tres fueron señalados como los responsables de aquel atraco a favor de los coreanos, quienes habían avanzado a Cuartos luego de eliminar a Italia en Octavos bajo condiciones también sospechosas.

Años después, cuestionado por una televisora española, el árbitro egipcio se lavó las manos diciendo que los errores habían sido de sus asistentes, como por ejemplo en una jugada en la que Joaquín mandó un centro que remató Fernando Morientes y que terminó en gol, pero el asistente marcó que la pelota ya había salido antes del centro, cuando en realidad el esférico jamás abandonó el terreno de juego ni de lejos.

"Por supuesto que tuvimos graves errores en ese partido cometidos por el árbitro asistente porque levantó el banderín diciendo que había salido cuando la pelota se encontraba en el campo. En ese momento tuve que señalar saque de puerta porque debo fiarme del asistente", dijo El Ghandour.

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"Es otro error del juez de línea. No había fuera de juego en esta acción", respondió cuando se le mostró otra jugada que fue anulada por el línea, quien marcó un inexistente offside.

Con todo y los errores, el egipcio se dio el lujo de decir: "Yo considero el encuentro Corea-España de los Cuartos de Final del 2002 como uno de mis mejores juegos".

CORAJE Y RABIA DE LOS ESPAÑOLES

Aquel partido terminó con el júbilo coreano por avanzar a Semifinales y con la frustración, tristeza y coraje de los españoles que se sentían totalmente robados por el egipcio y sus asistentes. José Antonio Camacho, entonces entrenador de esa Selección, recordó en un programa de la televisión lo que fue ese momento no solo en su carrera, sino en la de sus jugadores.

"Tanto el central como el línea estaban un poquito tocados (amañados), te lo digo porque lo que nos ocurrió en la prórroga no es normal; el línea vino directamente a meterse con nosotros, a molestarnos. Luego pitó en el primer tiempo dos o tres fuera de juego clarísimos que no eran. (Los árbitros) no tenían la personalidad suficiente ni el futbol, no sé qué clase de partidos habían pitado como para pitar unos Cuartos de Final".

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