Qatar será el Mundial del metro lujoso y las distancias cortas

En cantidad de sedes y estadios, el Mundial qatarí será radicalmente distinto a Brasil 2014 y Rusia 2018, en gran medida porque son países de extensiones radicalmente distintas.

El metro reducirá tiempos de traslado en Qatar.

El poderío económico será el distintivo principal que Qatar lucirá dentro de once meses, cuando se inaugure la Copa del Mundo del 2022, como también la facilidad de movilización entre sus sedes.

Mientras que en Brasil 2014 la distancia más larga entre estadios fue de casi 4,500 kilómetros (del sureño Porto Alegre, al Manaos en la plena Amazonia) y en Rusia 2018 de 3,000 (entre el Kaliningrado cerca de Alemania, y Ekaterimburgo que ya es Asia), para Qatar 2022 recorrer la distancia entre las sedes más lejanas será como ir del Estadio Azteca en el Sur de la Ciudad de México al Nemesio Díez en la cercana Toluca.

Debido a las dimensiones tan distintas entre los países de los dos últimos mundiales, en comparación con Qatar, para esta nación árabe solo serán sede menos de la mitad de las ciudades que en Brasil y Rusia.

Los estadios mundialistasde Al Rayann y Lusail, ¡con sello mexicano!


Brasil fue anfitrión con 12 estadios en 12 ciudades distintas, mientras que Rusia lo fue también con 12 estadios pero en 11 ciudades porque Moscú tuvo dos estadios. Por su parte, Qatar recibirá al Mundial en 8 estadios y apenas 5 ciudades.

Doha, la capital, será sede con dos estadios (el 974 y el Al Thumama), mientras que Rayan recibirá aficionados en tres estadios (el Internacional Khalifa, el Qatar Foundation y el Ahmed bin Ali). Las otras ciudades serán Lusail (con el Estadio Icónico Lusail), Al Wakrah (con el Estadio Al Janoub) y Jor (con el Estadio Al Bayt).

De esas localidades, las más alejadas son Jor (en el Norte) y Al Wakrah (en el Sur) y entre ellas apenas hay 71 kilómetros de distancia. Es por ello que la red del Metro conectará a casi todas las sedes mundialistas, con el distintivo de que sus estaciones parecen más centros comerciales de lujo, que sedes del transporte público urbano.

Las escaleras eléctricas y los elevadores aún lucen nuevos, con la facilidad de que en el mapa solo hay tres líneas interconectadas: una verde, otra roja y una más amarilla.

Sin signos de vandalización, el Metro qatarí incluso ofrece tres categorías distintas: servicio gold, otro familiar y el individual, por lo que los traslados son rápidos y cómodos, sin vendedores ambulantes, en un país que prácticamente erradicó la inseguridad.

El costo de la tarjeta es de 10 rial (unos 60 pesos) y un viaje cuesta 2 (12 pesos), para una red de solo 37 estaciones en un rango de 40 kilómetros, para recibir a alrededor de un millón y medio de personas, la cifra de visitantes internacionales esperadas para el Mundial.

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La justa de Qatar 2022 iniciará en lunes, el 13 de noviembre del próximo año a las 13:00 horas locales, en el Estadio Al Bayt. Tres horas después, el Estadio Al-Thumama, ubicado a poco más de 50 kilómetros, será sede del segundo juego, para lo cual sería necesario hacer un viaje de tan solo 40 minutos en automóvil, ese trayecto sin metro porque estos dos estadios, junto al 974, son los únicos que no tienen una estación enfrente.

Pero la situación cambia para los dos siguientes juegos de ese día, pues estos serán en el Internacional Khalifa y el Ahmad Bin Ali, separados por solo 15 kilómetros, lo que implica un recorrido de menos de 20 minutos en auto o 45 para recorrer las 15 estaciones en metro, incluyendo un trasbordo.

Incluso la distancia entre el Internacional Khalifa y el Estadio Qatar Foundation (también conocido como Ciudad de la Educación) es menor, de apenas 5 kilómetros, de manera que Qatar 2022 no solo será diferente a las últimas Copas del Mundo en cuanto a cultura, sino también en temas de distancias y movilidad.

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