‘Es peor fumar un porro que pegarle a tu mujer’; polémica frase de jugador argentino

El futbolista de Temperley en la Segunda División de Argentina ha hecho una declaración polémica por hablar de la violencia de género y la marihuana

Un jugador de la Segunda División habla de la violencia de género que se ignora en los futbolistas. Foto: Imago7

Leonardo Di Lorenzo, un jugador del equipo Temperley en la Segunda División Argentina, considera que en el futbol actual es más peligroso para la carrera de un jugador fumar marihuana que golpear a una mujer.

El mediocampista del cuadro de la Primera B es de los pocos futbolistas que habla sobre estos temas. Incluso habló de los difícil que es vivir la homsexualidad en las canchas del futbol mundial y reconoce que hay muchos jugadores gay que no suelen declararlo públicamente para evitar problemas.

Como en Artes Marciales Mixtas, jugador aplica un llave a su rival y desata batalla campal

"El fútbol es un ambiente muy machista y conservador. Tenemos que cambiarlo. Hoy te da positivo un control porque te fumaste un porro un fin de semana y no conseguís club, pero cagaste a palos a tu señora y le bajaste tres dientes y te mandan a tu casa un mes, te guardan un poco y podés volver a jugar", expresó en entrevista con un medio llamado Enganche.

"Los que tapan situaciones de violencia son, muchas veces, los dirigentes. Y eso tiene un correlato en los periodistas. Nos cuesta salir de nuestro pequeño lugar de comodidad. Por eso pondero la lucha de las jugadoras, por ejemplo. Esos movimientos están haciendo que nos cuestionemos cosas. Que nos preguntemos. Y eso es un montón".


La crítica del exfutbolista de San Lorenzo también fue hacia la mentalidad que inculcan en Argentina los mandatarios de los clubes que impiden a los jugadores disfrutar de sus carreras.

“Es difícil porque nos preparan de chiquitos de una manera y es lo único que tenemos. Hay que jugar en Europa, en la Selección, ganar plata y ser millonarios. Y es una cagada pensar que es sólo eso, porque muy poquitos llegan a cumplir ese objetivo. Es un lugar, además, de mucha meritocracia, con aquello de que me rompí el orto, llegué solo, nadie me regaló nada y no me importa el resto", comentó. 

"No es así porque en el medio nos dieron un montón de oportunidades y de ayuda. No llegamos sólo con nuestro esfuerzo. Salir de ese individualismo es complicadísimo".


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