Gianinna Maradona: ‘A mi padre le robaron el Balón de Oro violentamente y no lo disfrutó’
El galardón que ganó el Pelusa después del Mundial de México 1986 fue hurtado por la mafia italiana.
Gianinna Maradona, hija del histórico Diego Armando Maradona, reconoció estar “muy dolida” con la Justicia francesa, que autorizó este jueves la subasta del Balón de Oro que ganó su padre por ser el mejor jugador del Mundial de 1986, disputado en México.
La argentina aseguró que esta decisión es perjudicial para la memoria de Diego, pero mencionó que ya han apelado la resolución y esperan que se revierta la decisión, al revelarse que el robo fue de dominio público.
"Nos enteramos de la resolución y estamos muy dolidos por la memoria de nuestro padre. Hemos apelado la resolución y estamos muy confiados en que se revierta la decisión, porque se ha probado que a mi padre le robaron el Balón de Oro y que el robo fue de dominio público".
Gianinna apeló a la justicia hereditaria, afirmando que su padre en vida no pudo disfrutar del premio que fue robado “violentamente”, y por ende, les corresponde a sus hijos la devolución del galardón.
"Por un tema de justicia, y por la memoria de nuestro padre, nos corresponde a los herederos reclamar lo que nos pertenece. Fue robado violentamente sin que él pueda disfrutarlo".
Un precio récord en la historia
En caso de que proceda la subasta que está programada para el 6 de junio en la casa Aguttes, un evento que tendrá lugar en Neuilly sur Seine (en las afueras de París), el precio de venta podría superar los 10 millones de euros y convertirse en el objeto deportivo más caro de la historia.
El galardón, del que se perdió el rastro durante décadas, había sido adquirido por un precio insólito de 1,20 euros, por un coleccionista en una pequeña subasta parisina.
Los demandantes aseguran que el trofeo se lo robaron a Maradona en 1989, en un asalto planeado por la mafia italiana al Banco della Provincia, en Nápoles, y consideran que no hubo buena fe por parte del actual propietario del objeto, un coleccionista franco-argelino llamado Abdelhamid B.
Sin embargo, la Justicia francesa dio la razón a la defensa de Abdelhamid B. porque estiman que hubo buena fe por parte del comprador, quien no sabía que estaba adquiriendo un Balón de Oro.