Girona resiste para vencer 1-0 de visita al Celta y retoma liderato en LaLiga

El conjunto revelación en España sumó tres puntos de oro en condición de visitante ante una escuadra que le dio batalla en Balaídos.

A Girona le fue suficiente un gol (EFE)

El Girona recuperó el liderato de LaLiga en España tras derrotar con un gol de Portu al RC Celta, que se encontró con la portentosa actuación del arquero argentino Paulo Gazzaniga en el primer tiempo y se desinfló en el segundo, lo que motivó que sus aficionados volvieran a pedir la salida de Rafa Benítez al finalizar el encuentro.

Antes de encarar un mes de febrero decisivo para sus aspiraciones ligueras, en el que se medirá de manera consecutiva a Real Sociedad, Real Madrid y Athletic, el equipo de Michel recuperó su mejor versión para demostrar que la derrota copera en Mallorca no fue más que un pequeño accidente. En estos momentos lidera con 55 unidades, una más que los merengues.

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El Celta volvió a entrar al partido con muchas dudas en defensa, como si todavía no asimilara el golpe de la Real Sociedad en la Copa del Rey. En apenas 10 minutos, el Girona ya había avisado con un disparo lejano del venezolano Yangel Herrera, tras un doble error de Starfelt y Manu Sánchez a la hora de despejar el balón, y dos cabezazos del ucraniano Artem Dovbyk.

El equipo de Michel juega de forma alegre, avalado por su posición de privilegio en la tabla. Se siente cómodo masticando sus ataques, pero también cuando tiene que buscar rápidas transiciones. La riqueza ofensiva del Girona encontró respuesta en el Celta, que no acusó el gol de Portu tras una jugada coral de su equipo.

Por primera vez desde su llegada al banquillo de Balaídos, Rafa Benítez juntó a sus tres delanteros (Iago Aspas, Larsen y Douvikas). El técnico madrileño renunció a su pizarra, y sus jugadores lo agradecieron. Sólo su falta de acierto explicó que el Girona mandara al descanso porque el argentino Paulo Gazzaniga fue el mejor de los blanquirrojos en el primer tiempo.

El Celta atacó mucho y disfrutó de numerosas ocasiones. La primera de ellas incluso antes del gol visitante, pero Gazzaniga mostró sus reflejos después del potente disparo del lateral derecho Mingueza, que finalizó una buena jugada del otro lateral, Manu Sánchez.

Lejos de agachar su cabeza, el Celta se desmelenó tras el 0-1. Entre Gazzaniga y el larguero evitaron el empate después de un cabezazo de Larsen. Un minuto después, el portero argentino volvió a aparecer en el mano a mano con Douvikas, que disfrutó de las más clara en el minuto 38, tras un monumental error del central Arnau Martínez.

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Pero la segunda parte fue otra historia. El Celta se apagó en ataque y Benítez movió el banquillo para refrescar a un equipo que se había quedado sin futbol, lo que desesperó a su afición, que reaccionó con gritos de 'Benítez vete ya, Benítez vete ya' cuando su entrenador apostó por el brasileño Jailson y Ristic.

Los minutos pasaban y el Girona estuvo cómodo por la falta de futbol de su rival en la falta de creación. El Celta se había convertido en una sombra del que había sometido por momentos al equipo de Michel, que también refrescó su once con la entrada de Iván Martín. En la recta final, el Celta se volcó pero sin demasiadas ideas para inquietar a un Girona que aguanta el ritmo del Real Madrid.

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