'Todo se iba en pasaje'; Licha Cervantes reveló el corto sueldo que ganaba en sus inicios con Atlas
La hoy bicampeona de goleo de la liga femenil con Chivas platicó de lo complicado que fue incursionar en la competencia.
Alicia Cervantes, hoy delantera de las Chivas y bicampeona de goleo, inició en la Liga MX Femenil con la camiseta del Atlas, equipo al que llegó mes y medio antes de que arrancara el nuevo torneo, y en el cual su inicio fue complicado debido a que lo poco que le pagaban solo le alcanzaba para costear sus pasajes en Guadalajara.
“Fue un poco difícil por esa situación, porque aparte en Atlas no nos pagaban, nos pagaban muy poquito, nos pagaban mil 500 pesos al mes”, dijo la futbolista en una entrevista para el canal de Youtube del Canelo Ángulo. “No teníamos casa club, no teníamos nada, apenas si teníamos canchas y no eran de Atlas”.
Y es que Licha, originaria de Arandas, se tuvo que mudar con una de sus hermanas a la capital de Jalisco para poder entrenar con el cuadro rojinegro, club en el que debutó el sábado 29 de julio del 2017 en un duelo ante Chivas que perdieron 3-0.
“Todo se iba en transporte, en ese tiempo me vine con mi hermana a vivir, tenía una tienda de abarrotes y yo le ayudaba aunque no me gustaba. No ajustaba con mil 500 pesos. Agarraba tres camiones y con mil 500 pesos me los gastaba en transporte, no tenía para nada más. A veces hasta caminaba seis cuadras porque no ajustaba para el camión”, comentó.
Les negaron un aumento
Agregó que luego de terminar el primer torneo de la Liga MX Femenil en tercer lugar de su grupo, las jugadoras del plantel se acercaron con la directiva del club, que entonces era propiedad de TV Azteca, para solicitar un aumento, mismo que fue negado.
"Todas ganábamos lo mismo, ni más ni menos. Estábamos pensando en pedir un aumento, porque a veces no teníamos agua en los entrenamientos, los uniformes eran prestados y nos aventaban a la cancha más fea", dijo.
"Pedimos aumento y así como lo pedimos nos mandaron a volar. Nos dijeron que si queríamos seguir jugando va a ser con eso, no se les va a subir", dijo.
La complicada situación económica incluso provocó que Cervantes pensara en dejar el futbol, deporte que comenzó a practicar desde niña, gracias a sus hermanos.
“Yo en las noches me agarraba llorando y decía que ya no iba a jugar futbol, y bien arrepentida, pensaba que mejor que me hubiera quedado en Estados Unidos”, finalizó.