Lipatín, Fantick, Djalminha y otros grandes fiascos del América

América es sin duda uno de los clubes que históricamente más invierte dentro del futbol mexicano, la ambición por alcanzar el título torneo a torneo los ha hecho buscar a los mejores jugadores, sin embargo, existen varios refuerzos que quedaron a deber al vestir la azulcrema.

Y aunque el listado de jugadores que no rindieron lo que de ellos se esperaba es kilométrico, por ahora daremos un repaso a cinco nombres que dejaron mucho que desear durante su etapa con el América.

MARCELO LIPATÍN

Era el 2002, de cara a los compromisos que América disputaría en ese año (torneo local, Copa Gigantes de Concacaf y Copa Libertadores), buscaba reforzar su zona ofensiva, en la mira, un trotamundos: Marcelo Lipatín, el uruguayo parecía ser el jugador perfecto aunque sus números no eran del todo espectaculares.

En su primer partido como titular marcó un doblete ante La Piedad en el Estadio Azteca, sin duda ilusionó, pero hasta ahí llegó, su desempeño se puede calificar como “aceptable”, se coronó en el 2002 en aquella Final en la que América enfrentó a Necaxa y en dos torneos anotó en 12 ocasiones, su historia con el conjunto americanista finalizó un año después de su llegada.

Tras su salida, emigró al AS Bari de la Serie A, jugó por dos años en el balompie italiano, posteriormente regresó al continente americano para fichar con el Gremio de Porto Alegre; volvió al futbol europeo para sumar sus últimos torneos en Portugal, desistió una oferta israelí por apego a sus creencias religiosas y se retiró en el J. Malucelli Futebol. Obtuvo su licencia como agente de jugadores por la Asociación Uruguaya de Futbol y posteriormente ante FIFA, fundó Lipatín Sports en 2010, agencia que actualmente representa a varios jugadores brasileños en su mayoría ofreciendo asesoría jurídica y deportiva; Lipatín reside en Brasil.

MÁRCIO DELVI DA COSTA

Mejor conocido como “Fantick”, el futbolista brasileño llegó cuando el América aún celebraba su campeonato del 2002, su fichaje sorprendió ya que Da Costa no había jugado para ningún equipo en la Primera División de su país, procedía del Avaí de la Segunda División de Brasil.

Fantick, llegó a México en julio de 2002, trabajó durante un mes a prueba; el brasileño había tenido contacto con el Club América a través de Efraín “el Cuchillo” Herrera, quien le abrió la puerta al futbol mexicano, el mediocampista estuvo a prueba un mes, siendo observado por Manuel Lapuente y Mario Carrillo, sumándolo al plantel con gran expectativa, pero la expectativa superó a la realidad.

Su debut ilusionó al anotar en la primera jornada del Apertura 2002 el tercer tanto con el que América venció a Pachuca, siendo este el único gol que realizaría, su primer torneo fue para el olvido, continuó en planes de la directiva americanista, pero el segundo fue peor, por lo que fue enviado de regreso a Brasil en el 2003.

Márcio regresó a territorio carioca para jugar en equipos de divisiones inferiores a la Serie A brasileña entre ellos, Sociedade Esportiva e Recreativa Caxias do Sul, Joinville Esporte Clube, Criciúma Esporte Clube y Clube Náutico Marcílio Dias, retirándose en el 2009.

DJALMA FEITOSA DIAS

Djalminha, llegó al América en el ocaso de su gran carrera futbolística, en su época dorada el brasileño resaltaba por tener una gran técnica y una zurda que tras coronarse Campeón con Brasil en la Copa América Bolivia 1997 le otorgó el pase directo al futbol europeo fichando con el Deportivo La Coruña en la Temporada 99-00.

Su talento deportivo se vio opacado por su carácter, Djalminha era clonflictivo, situación que lo dejó fuera del equipo español, tal y como había sucedido años atrás en el Flamengo.

Lejos de su mejor versión llegó al equipo de Oscar Ruggeri con 33 años de edad, marcó en su debut generando falsas expectativas, las lesiones lo obligaron a retirarse, siendo las Águilas el último equipo de su carrera profesional.

El brasileño regresó para jugar futbol sala, quedando campeón con el Deportivo La Coruña en la Temporada 2007-2008, así como el título de la Copa del Rey en 2008. Djalminha actualmente es comentarista en ESPN Brasil.

OSWALDO VIZCARRONDO

Cuando Miguel Herrera llegó al América buscando sorprender en todos los sentidos, previo al Clausura 2012, en sus manos tenía lo que en su momento catalogó como la bomba del mercado de transferencias, el venezolano Oswaldo Vizcarrondo, y terminó siendo un error que le costó al equipo americanista 5 millones de dólares.

Llegó al nido tras formar parte del once ideal de la Copa América 2011, donde su país, Venezuela, alcanzó su mejor participación en la historia de la Vinotinto, llegando a Semifinales.

Oportunidades no le faltaron, disputó 11 encuentros en Fase Regular, siete de ellos completos y nunca fue del agrado del Piojo. Para la Liguilla ya no encontró cabida, y jugó solo 12 minutos, los cuales los hizo como centro delantero cuando el equipo perdía.

Tras un semestre en el futbol mexicano encontró lugar en el futbol argentino con Lanús, donde pudo dar el salto a Europa, en donde actualmente reside, y se encuentra en activo, como agente libre, en diciembre 2019 finalizó su contrato con el Troyes de Francia.

LUCAS CASTROMÁN

Tras abandonar Vélez Sarsfield, Lucas Castromán llegó al Club América en 2007, el argentino firmaría con las Águilas por tres años y cuatro milllones de pesos. Castromán es el único jugador de esta lista que se fue sin goles de Coapa, sumó en cancha 444 minutos a lo largo del semestre, su indisciplina y baja de rendimiento lo convirtieron en una gran decepción tanto para la directiva como para la afición del equipo azulcrema.

Al finalizar su etapa americanista, regresó a Argentina para jugar con Boca Juniors y Racing, en donde solo anotó dos tantos en un lapso de dos años, anunció su retiro en 2010, en 2015 sorprendió a propios y extraños al unirse a las filas en la Unión Deportiva Las Palmas en España.

A sus 39 años de edad, Lucas Castromán dirige el Centro de Formación Deportiva LuCas en el que desarrolla el talento futbolístico de niños y jóvenes.

Estos son algunos de los refuerzos que la afición americanista no olvidará, aquellos que salieron de las Águilas con más penas que glorias.

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