Andrés Guardado y el día que le gritó a Daniel Guzmán por apoyar a Torres Nilo
El Pechu reveló en entrevista a Tigres, lo que sucedió cuando el Travieso lo estrenó en la Primera División.
Llegar a la Primera División no fue una tarea fácil para Jorge Torres Nilo, este elemento nacido en Tijuana y criado en León, sufrió para cumplir su sueño de debutar en el Máximo Circuito.
Desde correr de la policía por hacer lo que más le gustaba, jugar futbol, hasta soportar envidias, burlas de quienes creía eran sus amigos, así fue la vida de Torres Nilo antes de que Atlas le diera la oportunidad que tanto había deseado.
"Mis inicios en el futbol fueron en la calle, mis amigos iban y me tocaban para salir a jugar; después seguí creciendo y la pasión por el futbol era llegar de la escuela y salirme todo el rato a jugar en la calle, íbamos a comprar pelotas porque las vecinas nos las agarraban, no nos las querían regresar si se volaban a sus casas, les pegábamos a sus puertas no intencionalmente, a veces nos echaban a la policía y salíamos corriendo", dijo Torres Nilo.
"Mi papá escuchó en la radio que estaban reclutando chavos para la Sub 15 de León, Guanajuato, de ahí fui, me calé y me eligieron, empezamos a salir a torneos, en uno de ellos me vio un visor de Atlas, me invitó, hice la prueba y me quedé desde los 14 años", recordó el Pechu en entrevista a Mediotiempo hace algunos años.
Ahora, Torres Nilo revela en entrevista a Tigres y su patrocinador algo más de aquel momento en que recibió su oportunidad de debutar con los rojinegros el 25 de febrero del 2006 bajo el mando de Daniel Guzmán; esto en la Jornada 7 del Clausura ante Estudiantes, cuando el lateral entró al minuto 85' de cambio por Rafael García: Andrés Guardado le gritó al Travieso para 'empujarlo' a que hiciera ese cambio.
"Recuerdo que sacaron a Andrés Guardado, tenía como unos 20, yo tenía 18, Andrés le gritaba 'Daniel mete al Pechu' y yo lo escuchaba y le decía al Andrés, 'sí, dile, dile' y ya, faltando cinco minutos entré, salió el Chiquis García y entré, fueron tres pelotas las que toqué, pero feliz de la vida".
Fue Rubén Omar Romano, quien a partir del A2006 con los rojinegros le dio la continuidad al Pechu, para que en el 2010 se convirtiera en seleccionado mexicano mundialista; poco después, ese mismo año llegó a Tigres, como refuerzo solicitado por Ricardo Ferretti, desde entonces se mantiene en la UANL.