Chris Benoit en México: el día que Villano III desenmascaró a Pegassus Kid

El canadiense tuvo que recorrer el mundo para hacerse de un sitio en la lucha libre y uno de sus pasos lo trajo a México, donde se hizo grande.

Villano III desenmascaró a Benoit en 1991.

Antes de los escándalos y de llenar espacios dedicados a la lucha libre en Estados Unidos, el canadiense Chris Benoit tuvo que recorrer el mundo para hacerse de un sitio entre los estelares, aventura que lo trajo a México, país donde pulió su técnica y gestó una de sus mayores rivalidades en la historia del pancracio, la que tuvo ante Villano III

En el Toreo de Cuatro Caminos era habitual ver a luchadores de gran calidad ya fuera de Estados Unidos, Japón u otra latitudes, por lo que escuchar nombres como Hulk Hogan, André el Gigante o Antonio Inoki era habitual, así como de jóvenes con mucho futuro, entre los cuales se coló el de Pegassus Kid, un muchacho de gran talla y cualidades que se ganaría el corazón de muchos.  

Nacido el 21 de mayo de 1967, Benoit comenzó su andar en la lucha libre en su país en 1985, aunque no fue sino hasta que emigró a la New Japan Pro Wrestling cuando empezó a hacerse de un nombre. Sumado a su fuerza, asumió el estilo nipón, lo cual le valió para llamar la atención en otros países y lo traería a un país del que nunca más se desligaría.

El recomendado del Villano V

Villano V realizó una gira por Japón a mediados de 1990 y ahí observó la capacidad del canadiense, quien era ya uno de los más queridos por el público japones. Tras enfrentarlo, Benoit le comentó su deseo de triunfar en las mejores plazas, por lo que al regresar al país recomendó a Carlos Mainez contratarlo. 

Si bien el arribo del canadiense fue en febrero de 1991 no tan fue rimbombante dado el corto recorrido que tenía hasta entonces; aunque para su fortuna, su personalidad y físico llamaron de inmediato la atención, además de que se encontró pronto con un oponente que lo haría brillar:el Villano III.

Ambos empezaron a gestar una rivalidad apenas se vieron, hasta llevarla a una lucha por el campeonado mundial de la WWF semicompleto. En solo dos semanas de gira en canadiense ganó el campeonato, realmente lo barrió, y esa espinita quedó grabada en el mexicano, quien seguiría con su rivalidad hasta llevarla a la lucha por la máscara

Pocas veces el Toreo lució así

La llamada Cueva de los Independientes vivió pocas tardes como la del 3 de noviembre de 1991, cuando el Villano III y Pegassus Kid se enfrentaron por las máscaras. Se sentía en el ambiente que el Pantera Rosa podía perder la tapa ante un gran rival, por lo que la reacción de la gente fue la mejor.

Ante un lleno impresionante, Villano llegó a esa lucha lesionado de las costillas y el hombro derecho, mientras que el canadiense era un auténtico toro que estaba listo para dar la sorpresa. Por eso que se diera un dominio que puso a temblar a muchos.

Pegassus ganó la primera caída y Villano emparejó en la segunda para dejar una tercera caída llena de tensión, ya que el encuentro se estaba inclinando a favor del visitante. En ella, el hijo de Ray Mendoza se quitó una rana y acabó por aplicarla al rival para sacar el triunfo en una lucha memorable que solo catapultaría al canadiense, quien sería una de las máximas estrellas del pancracio a nivel mundial.   


NOTAS MÁS VISTAS