Darwin Quintero, de la visita a un orfanato al deseo de adoptar un bebé

Santos Laguna es un club que se dedica a ayudar a la comunidad y que Gallos Blancos del Querétaro visite La Comarca este fin de semana hace recordar una anécdota poco común, y conocida, que se escribió en el seno del club lagunero.

Los albiverdes, en una de sus actividades correspondientes al voluntariado que hacen cuando van de visitante con Guerreros de Corazón, tuvieron en el año 2012 en Querétaro con el colombiano Darwin Quintero, una historia imposible de olvidar.

El colombiano fue uno de los elegidos para acudir a un evento de ayuda social en aquel estado, pero Darwin se sentía obligado por el club verdiblanco, camino al orfanato iba molesto, pues se sentía –relató- muy cansado.

Sin embargo, todo cambió al llegar a aquel lugar, pues se enamoró de un bebé recién nacido, al grado de pasar dos horas pegado a él y querer adoptarlo.

"Con el primer equipo muchas veces nos pasa que cuando llegan jugadores de otros equipos les cuesta un poco más de trabajo estas horas de voluntariado que no les hacían en otros equipos, pero luego hay testimonios increíbles donde ellos piden estas horas, levantan la mano y dicen yo voy. Hace algunos años jugábamos contra Querétaro, fuimos a un orfanatorio y Darwin Quintero no quería ir, venía realmente molesto conmigo, me decía que era increíble, que venía cansado, yo venía con mis hijos y le dije 'Darwin te tocó, venimos cinco jugadores, mi familia y vas a hacer voluntariado”, contó Laura Irarragorri, presidenta de Responsabilidad Social de Orlegi Sports, en entrevista a mediotiempo.

"Llegamos al orfanatorio, llegamos a un cuarto con bebés con más carencias que otros, a Darwin le tocó un bebé que habían encontrado cuatro días antes en un basurero, y le digo a Darwin 'dale mucho amor, es un niño que abandonaron en un basurero' y cuando ya no estaban esperando niños más grandes para jugar con ellos, Darwin me pide estar más tiempo con este bebé. 

Estuvimos dos horas y cuando terminamos nos dimos cuenta que Darwin se había quedado las dos horas con ese bebé; cuando salí me dijo: ‘Laura, yo quiero adoptar a este bebé, ya hablé con Valentina mi esposa y dijo que sí’… , Iniciamos ese proceso, que es muy largo en México, no se pudo hacer, pero Darwin a los dos, tres meses mandó un contenedor con ropa, comida, juguetes a ese orfanatorio de Querétaro y al año siguiente que nos tocaba ir al mismo orfanatorio de Querétaro, Darwin me dijo: ‘Laura no estoy en la lista, pero quiero ir a ver al bebé y a todos esos niños'. Viene ese cambio en el corazón de jugadores y jugadoras".

Es así como Darwin –jugador de Santos entre 2008 y 2015- vivió una experiencia maravillosa y, aunque no logró adoptar a aquel bebé, apoyó a ese orfanatorio en muchos aspectos; simplemente la perspectiva de la vida la había cambiado con aquella experiencia.

¿Qué es Guerreros de Corazón? 

"A través de Guerreros de Corazón en el caso de Santos, todos los jugadores y jugadoras hacen servicio social y voluntariado, en los partidos de visita, en la femenil hemos logrado que a donde vaya de visita haga voluntariado y servicio social con el rival, fuera de la cancha somos uno solo con un bien común que es ayudar a los demás, fuerzas básicas, primer equipo y colaboradores todos estamos en el voluntariado", explicó Laura Irarragorri.