El Gringo Castro revela su salario en América: 'Empecé con poquito, 15 mil pesos'

José Antonio Castro, quien fuera campeón en dos torneos con las Águilas, recordó los sueldos que le dieron en el club como jugador.

El Gringo Castro jugó durante ocho años en el América. (Mexsport)

¡Cuánta gente no quisiera ganar "unos poquitos" 15 mil pesos! Sabemos que el futbol es un negocio multimillonario en México y muchas partes del mundo, para muestra los grandes salarios que perciben los jugadores profesionales, aunque es un tema que pocas veces se trata por temas de seguridad y privacidad.

En la Liga MX pocos clubes pagan tan onerosamente como el América, el club propiedad de Televisa en el que José Antonio Castro debutó y tuvo sus mejores años, siendo dos veces campeón y miembro de la Selección Mexicana en una Copa del Mundo. Ya en el retiro y como auxiliar técnico en Querétaro, el Gringo recordó cuánto le pagaban las Águilas.

"Debuté ganando muy poquito, cuando fuimos campeones (2002) yo ganaba como 15 mil pesos porque tenía contrato de Liga de Ascenso, de la filial del América que eran los Halcones de Querétaro. Tenía un bono por minutos jugados, pensaron que no lo iba a obtener y lo logré (...) Recuerdo que con ese bono le di un automóvil a mi papá y todavía lo tiene", rememoró el exfutbolista.

'Yo soñaba con 50 mil pesos y me dieron mucho más'

Después de aquella primera temporada con el Primer Equipo de los azulcremas, al defensa mundialista en 2006 le tocó renovar contrato y sus expectativas rondaban los 30 a 50 mil pesos, pero cuando le pusieron la oferta en la mesa firmó "de volada" porque no creía los ceros que veía.

"Cuando voy a renovar, iba pensando 'a ver si me suben a 30 mil pesos, o qué tal si 50 mil', pero el contrato fue mucho más grande que esas cifras, firmé antes de que se arrepintieran por la cantidad", agregó en plática con Javier Alarcón.

Los consejos de su padre para mantener estabilidad emocional ante las grandes cantidades de dinero y lujos que le rodeaban ayudó a Castro a saber invertir capital en diferentes áreas y no despilfarrar lo ganado.

​"Invertí bien, no quiero hablar mucho del tema porque ya sabes (temas de inseguridad). Nunca fui un jugador fiestero, que dilapidara, la ropa cara o los relojes lujosos, no era de malgastar el dinero".

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