Tras duro paso en Gallos, Hernán Cristante llega fortalecido a Bravos

Hernán Cristante solo dirigió 10 partidos en Gallos Blancos antes de firmar con FC Juárez, pero recordó lo que tuvo que vivir en poco más de dos meses en el club, ya que tras la violencia en el Estadio Corregidora en la Jornada 9 ante Atlas, todo se puso a contracorriente.

El club fue multado, tiene que jugar a puerta cerrada, la directiva que encabezaba Gabriel Solares fue suspendida por cinco años y la franquicia tiene que venderse como parte de las sanciones por los hechos violentos.

El DT argentino habló con mediotiempo sobre lo significó la incertidumbre en el cuadro queretano, donde si bien no fue un buen torneo en lo futbolístico, tuvo el apoyo de la gente para salir adelante y dejó al equipo con la sensación de que haber logrado algo importante.

“Si bien no había sido un gran torneo en números, ni siquiera se jugó el repechaje, la sensación de haber ganado algo era muy presente por todo lo que había pasado, entonces yo digo que fue un gran torneo. Muchos me han llamado y me han dicho ‘saliste campeón en Querétaro’ por todo lo que sucedió y ahí encuentras el apoyo. Fue brillante lo que hicieron los jugadores, no en el aspecto futbolístico, en el aspecto consciente de lo que pasaba”, dijo en entrevista.

Cristante comentó que la gente de Grupo Caliente aguantó al tomar de vuelta al equipo durante marzo y abril, donde lograron salvar la multa por la porcentual al terminar en el lugar 15 de la tabla de cocientes.

“El apoyo de Jorgealberto, de Toño Nuñez, de ellos sin saber qué iba a pasar, con la idea de algo, de vender el equipo, aguantaron. En las malas situaciones pueden salir cosas extraordinarias y no queremos a volver esta sensación de pagar la multa, la vergüenza deportiva es mucha, sí afecta, quiere decir que las cosas no se hicieron bien en muchos aspectos. El responsable directo es el jugador y el técnico es el que se va. Acá me encontré con que estamos estableciendo todo bien, a partir de los errores y eso me da la sensación de que puede ser un gran desafío y un gran año”, añadió.

Su presente con Bravos

Ahora en Bravos, el DT de 52 años se topó con un equipo que tenía jugadores sin identidad, misma que considera que consigue con aspectos fuera del contrato que negocian, como la infraestructura de la institución, misma que ya trabajan por mejorar.

“Se han dado muchas circunstancias para que el jugador no tenga el perfil, hay cosas que se tienen que ir dando, trabajando, como profesional, la identidad con una institución no te la da un contrato, no te la da un escudo, te la da la parte vivencial, cómo lo sientas, la comunión que tengas con la gente que está trabajando, con la ciudad, e estadio, la infraestructura”, comentó.

“El jugador de futbol es una persona, siente, se desarrolla a través de los individuos que tiene a lado y eso es importante, tener tu lugar de entrenamiento, llegar un par de horas antes porque sabes que puedes desayunar, que puedes conversar con tu gente, tomar tu tiempo para la rehabilitación, eso es importante, eso te da identidad y me parece que ahí estuvimos cojeando, no tan finos, todo suma. El jugador debe verlo, palparlo y tiene que sumar”.

A Cristante no le preocupa llegar como reemplazo de Ricardo Ferretti, ya que no intenta demostrar ser mejor que él, al contrario, es un privilegio para él que se hayan fijado en su persona para continuar el camino que inició Tuca, el cual considera fue bueno a pesar de los malos resultados.

“En mi las comparaciones no caben, no me define la ropa que uso, un auto, un reloj, me define lo que siento, lo que creo y la preparación que tengo. Entonces tampoco me define lo que hizo Tuca acá. Hizo un gran trabajo y los resultados fueron malos, y lo puedo decir, es futbol. Ser el que continúa la línea de Tuca es un honor, también lo puedo tomar como un privilegio, porque tener trabajo en este medio es muy complejo y que se hayan fijado en mí, en lo que he hecho y lo que puedo aportar, e un honor. No quiero mostrar que puedo ser mejor que Tuca, porque eso no va a suceder, tengo que mostrar que soy distinto y que puedo aportarle algo a esta institución y equipo”, declaró.

Aunque en el último año no sacó los resultados que esperaba en su segunda etapa con Toluca o en Querétaro, Hernán afirmó que a Bravos llega a trabajar y considera que el club fronterizo tiene el entorno para hacer un proyecto protagonista.

“Soy una persona que tiene sus miedos, pero normalmente los he superado, me gusta esa sensación, el hecho de poder superarme a través de un desafío, no de una mesa linda, puesta. No estoy en París, en Mónaco, en Milán, no estoy en una capital importante, en un equipo grande. Vine a trabajar, sé de qué se trata, no vine a aparentar ser un director técnico, soy un hombre trabajador, muy trabajador y mi equipo de trabajo es igual. Están las condiciones dadas para tener un punto de partida y entender que del fracaso se aprende”, finalizó.