Jesús Alonso Escoboza, el refuerzo de América que resurgió de sus cenizas
Luego de sufrir una lesión lumbar que casi lo orilla a retirarse, Alonso Escoboza supo revertir su situación para recuperar un nivel que hoy lo tiene en América
Una lesión lumbar dejó fuera del Mundial de Brasil 2014 a Alonso Escoboza, quien batalló durante un año para volver a jugar futbol y varios más para recuperar la confianza y su nivel, el cual, asegura, ya lo alcanzó y por eso quiere aprovechar la oportunidad que le brindó el América.
El sinaloense recordó con Mediotiempo, todo el viacrucis durante esa etapa cuando militaba con Santos, en la que se dudaba que volviera a jugar a la pelota y después, el proceso que atravesó en otros clubes para recuperar la 'memoria'.
“En ese momento, tenía la ilusión como todos los jugadores de estar en un Mundial y llegó la lesión y se me vino el mundo encima, estuve más de un año fuera y fue muy doloroso para mí” , dijo en entrevista.
“Fue un año muy triste, no encontraba mejoría en la lesión. El primer diagnóstico que recibí fue que no iba a poder jugar más porque era una lesión en la espalda baja y salí triste pero no le creía al doctor”.
La lesión parecía desaparecer por completo y cuando volvió a jugar en el Clausura 2014 solo disputó dos partidos y recayó, por lo que en su mente pasó la idea del retiro.
“Seis meses después me recuperé y jugué pero recaí, y ahí fue donde las palabras del doctor se me volvieron a aparecer en la mente y, hablando con la gente que quiero, tomé el reto de recuperarme y gracias a Dios lo pude hacer”.
La falta de confianza hizo que su carrera fuera a menos, pasó a Tijuana y de ahí a Jaguares y después a Puebla, teniendo como principal característica en todas estas instituciones la falta de minutos, por lo que esto lo obligó a probar suerte en el Ascenso MX con Dorados.
“Regresé y empecé a caer en equipos donde no tenía minutos, que la única manera que tuve fue regresar al Ascenso MX, pero iba con esa idea de mejorar porque si no me iba bien ahí ya me iba a quedar ahí o iba a desaparecer y por eso lo tomé como una buena oportunidad y llegó Maradona y él me ayudó mucho y luego me fui a Querétaro donde Vucetich me ayudó para seguir creciendo y luego llegó esta oportunidad”.
América, el reto más grande
Luego de una gran temporada con Querétaro, Miguel Herrera, que siempre ha confiado en él, lo llevó al América, club que significa su primer gran reto en un equipo de los llamados grandes en el futbol mexicano.
“Miguel ha sido algo muy importante en mi carrera pero también sé que él no regala oportunidades y sabe lo que puedo aportar y por eso me eligió, porque hoy tengo mi nivel y la confianza que se requiere”, señaló.
“La exigencia aquí es más marcada, se siente esa presión de que siempre tiene ganar el equipo como sea”.
Escoboza es un jugador que puede ocupar más de una posición en la cancha, pues lo han probado como volante por izquierda y derecha, además de que también puede ser lateral izquierdo como lo hizo en Gallos.
“Me siento muy bien jugando en la posición que se me requiera, incluso en Dorados jugué como volante por derecha, el torneo pasado jugué como lateral izquierdo, el sábado Miguel me usó como volante por las lesiones que hubo y me he entendido bien con el resto del plantel”.