Como en Lobos, Rafa Puente Jr. vuelve a sufrir tras un gran despegue

A Rafael Puente parece que se le está haciendo mala costumbre tener un primer torneo muy bueno y un inicio de segundo para el olvido. Le pasó con Lobos y ahora en Querétaro.

Rafael Puente va con cuatro derrotas en el Clausura 2019. (Mexsport)

Rafael Puente Jr. está ante un prematuro punto de inflexión en su carrera: acostumbrarse a que las segundas partes no sean buenas o evitar que ello sea tradición.

Sorpresivo en su primer torneo en Liga MX con Lobos BUAP (Apertura 2017) para luego ser cesado en el siguiente semestre, el estratega va por el mismo camino en Gallos después de que el torneo pasado los llevó la Liguilla, pero en el actual suma cuatro derrotas y hasta él ya se puso ultimátum.

La campaña anterior, el Querétaro estrenó banquillo con Puente Jr.  y al final sumó nada despreciables 26 puntos que los llevaron a Cuartos de Final, donde cayeron ante Cruz Azul.

Pero, sorpresivamente, este semestre no suman ni un punto al caer con Atlas, Pachuca, Monterrey y León, ante estos últimos de locales y por goleada de 4-0, curiosamente el mismo resultado ante la Fiera del torneo anterior, si bien a estas alturas del Apertura 2018 el Querétaro al menos sumaba 4 puntos.

En Lobos BUAP la historia fue muy similar. Tras acaparar los reflectores con el ascenso a Primera, para el Apertura 2017 Puente siguió en el proyecto y consiguió 7 victorias, 2 empates y 8 derrotas en el primer torneo de Liga MX en la historia del club.

Sin embargo, pese a terminar en décimo lugar y llevar a los de la BUAP al camino de la permanencia con 23 unidades, el Clausura 2018 fue un auténtico terror. El estratega tuvo una racha negativa en sus cuatro primeros juegos, con 3 derrotas y 1 empate.

La cabalística Fecha 13 fue la de su cese luego de caer en casa frente al Toluca. Al final del torneo, los licántropos terminaron en el sótano general, pero apenas un mes después, Rafa fue fichado por el Querétaro.

Ahora la misión luce dura porque el sábado visitarán al América y aunque un triunfo sería épico, al menos el entrenador prometió que la actitud y los errores no serán los mismos.

NOTAS MÁS VISTAS