La era del desarraigo: en Liga MX se ‘normalizaron’ las mudanzas de clubes
La Ciudad de México, Guanajuato y ahora Michoacán con Monarcas han sido los más afectados en los últimos años pues les han quitado hasta dos equipos.
Las mudanzas en el futbol mexicano son algo que se ha "normalizado" con el paso de los años y particularmente la última década se ha convertido en un carrusel de franquicias, pues en ese lapso se acumulan las de cinco equipos tradicionales en la Liga MX o que habían conseguido su ascenso a ella.
A mediados de 2013 hubo una "carambola" de franquicias. Tras descender, Gallos Blancos compró a Chiapas y San Luis se mudó a Tuxtla Gutiérrez con lo que los potosinos se quedaron sin equipo en Primera.
Ese mismo año y después de conseguir el ascenso por la vía deportiva, La Piedad desapareció al mudarse a Veracruz. A esas se suma que en 2019 Juárez compró a Lobos y ahora en 2020 con la de Morelia a Mazatlán, confirmada este martes.
CDMX, MICHOACÁN Y GUANAJUATO, LOS MÁS GOLPEADOS
En los últimos 21 años hay tres estados de la República que particularmente han sido los más golpeados: la Ciudad de México, Michoacán y Guanajuato, toda vez que a esas tres entidades federativas les han quitado dos equipos de Primera División, mientras que a San Luis y Puebla les han "movido" a uno, además de que a Chiapas y Veracruz les han desafiliado otra franquicia.
A Michoacán no solo le quitaron al equipo más importante del estado con la venta a Mazatlán. Siete años atrás, en el 2013, cuando los Reboceros de la Piedad lograron el ascenso por la vía deportiva, el entonces dueño del equipo, Fidel Kuri Grajales, alegando falta de apoyo por parte del gobierno y de la afición optó por llevarse a su franquicia a Veracruz.
Así los Tiburones Rojos jugarían en la Liga MX, mismo equipo que seis años después, fue desafiliado. Peor aún fueron esos enroques si se toma en cuenta que a los Reboceros ya los habían mudado a Querétaro al término del Invierno 2001 tras haber logrado el ascenso a Primera ese mismo año. En 2002 regresaron a esa ciudad pero ya con una franquicia de "Primera A".
ADIÓS NECAXA, ADIÓS ATLANTE
En el caso de la Ciudad de México, fue en la década de los dos mil cuando las mudanzas fueron frecuentes. En 2003, Necaxa dejó a la capital para irse a Aguascalientes, donde ya llevan 17 años pero con uno de los promedios de asistencia más bajos de la Liga MX.
En 2007, Atlante hizo lo propio para irse a Cancún a jugar en el Estadio Andrés Quintana Roo, donde en su torneo debut fue campeón aunque luego sufrió también con asistencias muy bajas hasta que en 2014 descendió al Ascenso MX, categoría en la que se mantiene.
DE ASCENSOS BORRADOS Y MÁS MUDANZAS
En Guanajuato también saben de ello. En 1999, Puebla había perdido la categoría por la vía deportiva, por lo que compró la franquicia de Unión de Curtidores (club originario de León), que ese año había logrado el ascenso en las canchas. Poco más de dos años después, al terminar el Invierno 2001, el Irapuato que jugaba en Primera División fue trasladado a Veracruz para así convertirse en Tiburones Rojos, que en ese entonces era propiedad de Grupo Pegaso del empresario Alejandro Burillo.
Cabe mencionar que en el caso particular de Irapuato, un año después volvió a tener equipo pero en Primera A, porque adquirió la franquicia de Querétaro que estaba en esa división. Dos años después, en 2003 logró el ascenso y solo pudo estar un año en Primera División.
Es así que la mudanza de Monarcas vuelve a ser un episodio triste para las aficiones arraigadas aunque, peor aún, ninguna novedad.
¿CUÁNDO INICIARON LOS CAMBIOS EN LA LIGA MX?
Fue en 1953-54 cuando se dio el primer cambio de sede en el futbol Mexicano, Marte, que jugaba en la entonces llamada, Ciudad de México, donde permaneció durante 10 temporadas, se mudó A Cuernavaca para jugar en el Deportivo Morelos, fue entonces cuanto también consiguieron su primer título.
Para la temporada 1970-71, Oro por problemas económicos vendió su franquicia y se convirtió en Club Social y Deportivo Jalisco, para ser el primer caso de cambio de nombre, pero mantuvo su sede en Guadalajara y permaneció diez temporadas hasta descender en 1980.
Sin embargo, el primer cambio de nombre y sede de un equipo fue el de para la temporada 1974-75, cuando Torreón, se mudó a Guadalajara con el nombre de U. de G.
Así comenzaron los cambios de nombre y ventas de franquicias, en el futbol mexicano, entre las que destacan las ocasiones en las que Veracruz se ha visto involucrado en este tipo de negociaciones para mantener la categoría, o los cambios de sede que Atlante de la Ciudad de México a Querétaro, Nezahualcoyotl y Cancún, pero siempre manteniendo el mismo nombre.
*71-72 a 95-96 Estadio Azteca, Inv. 96-Cl.18 Azul y Ap.18-a la fecha regresó al coloso de Santa Úrsula