Ya tengo hambre de ser campeón con Pumas; como que la paciencia se me va agotando": Nicolás Freire
El defensa encontró en el Club Universidad su lugar ideal; se toma la Final de Concachampions perdida como lección y motivación.
Nicolás Freire ha encontrado su lugar en Pumas, luego de una trayectoria que incluyó jugar en la Eredivisie de Holanda con el Zwolle.
Por primera vez en su carrera Nico renovó un contrato y ahora busca redondear estos años como profesional con un título; incluso podría convertirse en el capitán para el Torneo Apertura 2022.
En entrevista con mediotiempo, el zaguero habló de su paso con Pumas y, en especial, de la última Final de Liga de Campeones de la Concacaf que caló hondo en el argentino, que espera que el grupo actual haga del próximo torneo un episodio histórico.
La entrevista con Nico Freire, el defensa de Pumas
¿Por estadística, le toca a Pumas ser campeón?
“No sé si por estadística. Atlas, por ejemplo, después de no sé cuántos años metió un bicampeonato. No me baso en las estadísticas, me baso en el convencimiento del grupo, en la creencia del grupo, en la fidelidad del grupo. Los chicos que se han sumado son buenas personas; por ahí los más viejos, los que hemos estado más tiempo en la institución, debemos demostrarles que vienen a sumar y que todos empujemos para salir campeones”.
¿Tienes un mensaje para la afición?
“Vamos a ir en busca del campeonato. No se me sale, siempre digo ‘vamos a dar lo mejor, esperamos que sea una gran temporada’. Ya tengo hambre de ser campeón; como que la paciencia se me va agotando. Tenemos que querer que sea nuestro momento”.
¿Te ves con el gafete de capitán?
“Vos sabés que nosotros, respecto al capitán, hacemos una votación; votan todos los que conforman el plantel y sí... yo soy uno de los más longevos del plantel, de los que más años lleva. Es pensamiento libre, el que el grupo considere vamos a votar a esa persona y los que estemos alrededor vamos a acompañar. Al final, el que lleva la cinta es importante, pero los que acompañan son fundamentales”.
¿Qué piensas de las salidas de Alan Mozo y Alfredo Talavera?
“Alan, cuando yo llegué, ya estaba en el club; es un chico que cuando lo vas conociendo te das cuenta que es una gran persona, con un gran corazón. Nos hicimos cercanos al final, hablamos de que son ciclos. Le contaba que me tocó estar seis meses en un lado, seis meses en otro, un año en otro lado y recién acá vine a encontrar mi lugar; a él le pasó al revés: estuvo siempre en el mismo lugar y ahora le llega la posibilidad de probar nuevas experiencias".
“Es parte del futbol, es parte de objetivos personales y hay que entender que somos seres humanos; tenemos nuestras metas, nuestros sueños y se toman diferentes caminos. Con Alfredo, los últimos dos años, tuvimos la posibilidad de jugar la Final en el 2020, ahora esta última final (de Concacaf), compartimos muchas cosas y, sin duda, que él ha dejado un gran legado en el club como persona y profesional. A nosotros cada salida de jugador impacta, te duele, porque al final es la familia que elegimos en el día a día”.
De su renovación con Pumas, Nico Freire dijo: “En Liga de Quito tuve la posibilidad de extender el vínculo y, perdón por el término, pero decimos ‘culo-inquieto’ cuando estás en un lugar (y te quieres ir). Me picaba el bichito de vamos acá, vamos allá, y así medio trotamundos y cuando se presentó la posibilidad de renovar acá en el club, lo hablé con mi familia. Ellos siguen al club por las redes, que tienen mucho impacto, y veían que me trataban bien, como que las cosas en líneas generales iban bien y me dejé apañar, sentir un poco el cariño que me estaba brindando la gente, no solo el hincha, sino la gente del club. Cuando me llegó la noticia fue un momento especial, lo he dicho, uno de los más importantes de mi carrera y estoy muy agradecido con el club”.
Es una historia como la de Darío Verón.
“Sería lindo, no sé si de tal magnitud, porque yo llegué más grande, pero sí porque me siento muy identificado con el club y me di cuenta, más que en las victorias, me di cuenta en las derrotas. En las dos Finales que me tocó perder sentí cosas muy fuertes que no me habían pasado antes. Esta última Final me impactó mucho, no todos los días se juega una Final y haber quedado en la historia del club fue, sigue siendo, un sueño, un objetivo. Pero cuando las cosas no se dan, me impactó mucho. Lo sentí mucho en las vacaciones y ahí realmente me di cuenta de las cosas que me generan defender esta camiseta, cosas que por ahí antes no me pasaban y no porque no sea una persona emocional sino porque no generas ese vínculo de compatibilidad”.
¿Hiciste algo tras la Final de Concacaf?
“Hablar con mi familia. Me apoyé mucho en mi familia, en mi novia, trato de apoyarme en la gente que me ha visto en lo más bajo y el que me ha visto en lo más alto. Muchas veces me aíslo completamente y hago un trabajo introspectivo, pero trato de desenchufarme completamente y justo pasó que nos dieron las vacaciones, fui con mi familia y eso me hizo salir más fuerte”.
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