'No me arrepiento de haber jugado en Chivas'; Oribe Peralta agradece esa última oportunidad
Aunque Peralta casi no vio minutos con el Guadalajara, asegura que es un ciclo que tuvo que pasar en su vida; espera que su libro sea inspirador.
El día del adiós, como un tipo de buena prosa y con ese agregado poético deportivo, Oribe Peralta escribió unas líneas bastante emotivas, y aquel capítulo fue como un vitamínico para intentar llenar hojas con letras.
Ahora El Cepillo, lanzado como escritor, decidió hacer "Mi Once Ideal", pieza en la que desmenuza varias de sus vivencias y, entre tantas que pudo rubricar en los llanos nacionales e internacionales, responde en entrevista a mediotiempo que no se arrepiente de nada en la ruta que decidió completar.
Ni siquiera de esa opción que tomó para ser transferido del América a las Chivas, con todo lo que ello implicaba, y sin importar que sus minutos en el rectángulo verde se redujeron a prácticamente nada.
“La gente cree que me siento arrepentido por esa decisión, por no jugar, pero viéndolo desde lejos entiendo que debía estar ahí, entiendo que los momentos son los que tienes que pasar, habrá quien diga: ‘que es que solo fuiste a cobrar, y no sé qué’, pero no tienen idea de la satisfacción de cuando me retiré, que me escribieran muchos de mis compañeros o que se hayan tomado la molestia de llamarme, qué Amaury (Vergara, presidente del Guadalajara) me haya mandado un mensaje, que muchos de los que trabajan ahí me hayan compartido sus impresiones de lo que yo hice por ellos, está bien con todo lo que pasó.
“No tengo ningún arrepentimiento, creo que todo en esta vida es un ciclo y así como inició alguna vez, en algún momento tenía que terminar y estoy feliz por haber sido yo quien decidió cuando terminara”, comparte.
Siempre cercano al futbol
Y El Cepillo, quien además de promover su obra, últimamente ha sido un invitado recurrente a eventos que tienen que ver con iniciativas de formación deportiva y profesional, acepta que ponerle el punto final a su historia en el balompié nada tiene que ver con desligarse de su mayor pasión.
“Realmente el deporte va a ser parte de mí toda la vida, y el futbol también, entonces no me puedo alejar, aunque ya me haya retirado de lo profesional, sigo teniendo partidos, jugando con mis amigos cáscaras y todo eso; va a ser muy difícil que me aleje del futbol como tal”, acepta.
Que toque fibras
Y retomando su nueva faceta dándole a las teclas y poniendo a maquinar las ideas, comenta que se animó porque entiende que podría ser inspirador para otras personas que buscan ser alguien en la vida, como él pudo lograrlo.
“¿Por qué escribir un libro? Fue como un llamado a dejarle algo a la sociedad, a inspirar más allá del futbol, porque creo que todos tenemos una historia valiosa que contar y podemos inspirar a veces a los más cercanos que tenemos, y creo que con eso es suficiente, por eso escribir un libro, sentía esa necesidad de compartir con los demás.
“Hacerles entender, o hacerles saber que los futbolistas somos personas como cualquier otra, que también tenemos problemas, que también tenemos tropiezos, y que el fracaso como tal no es lo contrario al éxito; el fracaso es un paso para conseguir el éxito, es un escalón para ir al éxito, entonces quería compartir esto con la gente y decirle que la historia de Oribe Peralta, si se puede identificar con alguna de las historias que vienen ahí, y saber cómo aplicarlo a su vida, entonces ya con eso yo estoy por bien servido, si a una persona este libro logra impactarlo, estoy feliz y contento”.
Y finaliza la charla: “me gusta, no escribo tanto, pero me gusta poner pensamientos, a veces en papel, ahora en el celular, o de vez en cuando hacer una nota de voz y dejarla ahí, porque creo que saca todas esas emociones que tú tienes y eso para mí es un desahogo”.