¡Una década de aullidos! Raúl Jiménez, el delantero que debutó hace 10 años en el América a la europea
Alfredo Tena lo debutó en el 2011 ante el Morelia y lo hizo basándose en una fórmula de ataque europea.
El lobo ya ha madurado. Ya son 10 años de que el Lobo de Tepeji del Río, Raúl Alonso Jiménez, dio su primer aullido en el futbol profesional, ya que justo un 9 de octubre, pero del 2011, debutó en Liga MX como jugador del América. Curiosamente, su oportunidad se dio gracias a un modelo de ataque europeo.
La Jornada 12 del Apertura 2011 vio nacer la carrera del atacante mexicano, gracias a la confianza de Alfredo Tena, quien lo había tenido en las Fuerzas Básicas del América tres años atrás de su debut. El Capitán Furia lo mandó a la cancha ante el Morelia, aunque para incrustarlo en el conjunto americanista tuvo que pensar en una estrategia al estilo europeo para poder jugar con 2 nueves.
“Ya había tenido en Fuerzas Básicas 3 años a Raúl, ya lo veía maduro completamente, tenía ganas, ya se le veía la codicia para entrar a la Primera División, estaba físicamente bien. Al tomar yo al equipo lo primero que hice fue llevármelo a la banca y en cuanto tuve la primera oportunidad lo metí a jugar”, aseguró Tena en entrevista con Mediotiempo.
“Era un muchacho que ya había cumplido todos los procesos, el único problema es que estaba el Chucho Benítez y (la cuestión fue) cómo acomodar a los dos, porque no iba a sacar a Benítez, (pero) tenía que hacer que Raúl pudiera jugar. Fue mi mayor trabajo encontrarle una posición a los dos para que el equipo tuviera más peso en el área, así lo metimos contra Morelia y después ya fue titular indiscutible y de ahí no lo sacamos más.
Por eso, vio en Europa cómo equipos usaban dos nueves en el ataque, y el ejemplo claro fue lo que después hizo el Bayern Munich con Robert Lewandowski y Mario Mandzukic.
“Tomé como ejemplo algunos equipos internacionales que jugaban con dos ‘nueves’, por ejemplo, Lewandoski y Mandzukic, dos nueves de referencia. Jugando como segundo nueve, entrando por izquierda, me pareció que iba a dar buen resultado, y atacando el espacio de los volantes centrales también Raúl sabe jugar; no solo es un goleador, sabe asistir como lo ha mostrado en el Wolverhampton”, añadió.
“Se lo comuniqué: ‘estás para jugar’, ‘sí profe’, dijo; se le veía la codicia, las ganas por entrar, para nada estaba espantado, ya tenía muchos juegos internacionales de giras en Fuerzas Básicas, Selecciones Menores, ya estaba listo, el chiste era empujarlos a la cancha y no se puso nervioso. Se puso contento, me dijo ‘esta es la mía’”, recordó el Capitán Furia.
Un plus para Jiménez fue que cayó bien ante los delanteros que tenía ese América con Vicente Sánchez, Christian Benítez, y otros elementos de experiencia como Jesús Molina.
“Le cayó muy bien al Chucho Benítez, no sintió que estaban agrediendo su espacio, lo llevaba muy bien, estaba el Rolfi Montenegro, Jesús Molina, recuerdo que lo apoyaron bastante, lo hicieron sentir como que no era un intruso, y funcionó todo bien, aparte empezó a hacer goles”, mencionó.
El primer gol de Raúl con América en Primera División fue el 30 de octubre del mismo 2011, lo hizo ante Puebla y ya de ahí nadie lo detuvo.
En el 2014 brincó a Europa para jugar con el Atlético de Madrid donde no fue lo que se esperaba, después pasó al Benfica de Portugal y para el 2018 llegó al Wolverhampton, donde se convirtió en figura.
Se descoordinó por su crecimiento en la cantera del América
No todo fue felicidad para Raúl Jiménez, quien en su etapa de delantero en la Sub 17 de las Águilas sufrió descoordinación por su crecimiento, por lo que tuvo dos o tres meses malos dentro de la cancha.
“Alguna vez, cuando tenía 16 años, empezó a crecer en forma desproporcionada, no era muy alto y de repente le empezaron a doler los tendones de crecimiento, se descoordinó, creció mucho, el pie muy grande y se veía un poco descoordinado, tuvo 2 o 3 meses malos cuando estaba en la Sub 17”, mencionó Tena.
También recordó el trabajo que le costó convencer a su hermano Luis Fernando de llevarlo al proceso olímpico rumbo a Londres 2012.
“Se fue después a la Selección Olímpica, tuve que molestar mucho a Luis Fernando para que lo fuera a ver, para que se lo llevara, hasta que un día lo convencí, fue a Coapa a verlo jugar y le gustó mucho, incluso hizo un gol de chilena ese día que lo fue a ver”, relató.