El día que Tomás Boy y todo Tigres fue a la cárcel por agredir a un policía
Mateo Bravo, exportero de los felinos, contó la anécdota en la cual todos se fueron detenidos por orden de Carlos Miloc.
Tomás Boy cumple 70 años de edad este 28 de junio y a lo largo de su vida y carrera ha sumado infinidad de anécdotas que contar, como la del día en que todo su equipo fue a dar a la cárcel, ya que fue arrestado tras jugar un partido en el Estadio Azteca contra Atlante.
Todo esto se debió a que el futbolista de los auriazules, José Sánchez, golpeó a un policía previo al partido de la Temporada 1981-1982 y Carlos Miloc decidió que si se iba uno, se iban todos arrestados y Boy, siendo la figura, dejó esto a un lado para apoyar a sus compañeros y se fue también arrestado.
La historia comenzó porque Pepe Sánchez quiso ingresar a su sobrino enfermo a la cancha del Coloso de Santa Úrsula, donde obtuvo permiso para hacerlo; sin embargo, la información aparentemente no llegó a los policías que cuidaban el acceso.
"(El policía) No se dio cuenta que traía sus muletas, entonces empuja al niño y lógicamente Pepe Sánchez se le fue encima al policía, otro compañero también, para reclamarle por empujar al niño, tendría unos 10 años. Cuando iba al campo subiendo la escalinata del vestidor a la cancha, ahí fue donde se hizo la bronca, él policía alcanzó a ver en la espalda que decía Sánchez y empezó a boletinar que un tal Sánchez lo había agredido, se hizo todo el merequetengue".
"Don Carlos le dijo ‘ten, ponte esta casa para que no se vea el Sánchez’, el chamaquito ya no pudo salir por lo mismo; anduvieron preguntando quién era Sánchez y ya para empezar el juego, Pepe se quita la playera y se dan cuenta que ya andaba jugando en el campo", recordó Mateo.
Las autoridades fueron hasta la puerta del vestidor buscando a Pepe, pero se toparon con el Tanque, quien al medio tiempo del encuentro les negó la entrada.
"Don Carlos no dejó entrar a la policía al vestidor, que hasta terminar el juego se iba a ver cuál había sido el problema; cuando termina el juego van y le dicen a don Carlos que vienen por Sánchez, arrestado por golpear a un policía. Le explica a los policías lo que había pasado y dijeron que no, que José Sánchez se iba detenido y don Carlos se enojó, dijo ‘claro que no, va todo el equipo, si vas a arrestar, vas a arrestar a todo el equipo, si no, no te llevas a Sánchez’", platicó.
Fue así que todo Tigres de aquella edición que ganaría el título precisamente ante Potros, en el Azteca, llegó a la cárcel, donde estuvieron al rededor de una hora hasta pagarse la fianza.
"Nos fueron escoltando al camión de Tigres rumbo a la Delegación, nos bajamos todos a apoyar a nuestro compañero, ya al juez se les explicó toda la situación:.. el juez dictaminó que había una violación por haber golpeado al policía, se pagó una multa y nos dejaron salir a todos, pero todos estábamos detenidos, pero por instrucción de don Carlos".
Ningún jugador se opuso a lo que dijo Miloc. "Éramos un equipo muy unido, nos metíamos todos a defendernos; don Carlos tenía esa energía de que nuestro equipo era un equipo en todo, en las trompadas y en todo", finalizó.