Benfica podría descender en Portugal; investigan soborno millonario a árbitro
El diario O Jogo publica este jueves que hay una serie investigación contra el exequipo de Raúl Jiménez por pagar dos millones de euros a un silbante.
El equipo más ganador de Portugal podría protagonizar un escándalo mundial por amaño de partidos. El diario O Jogo revela que se investiga al Benfica por supuestos sobornos a un árbitro, lo que de confirmarse significaría su descenso automático a la Segunda División con pleno campeonato en curso.
Con 37 títulos de Liga Portuguesa, 26 de la Copa de Portugal y dos Ligas de Campeones, además de tener en su pasado a mexicanos como Raúl Jiménez y Kikín Fonseca, las Águilas son señaladas por darle dos millones de euros al silbante Bruno Paixao para ser beneficiados deliberadamente en diferentes partidos del campeonato local.
Lo más grave es que Paixao, quien ya está retirado de las competencias oficiales tras más de 30 años de carrera y quien tuvo múltiples polémicas en su trayectoria, ya confirmó que recibió dinero por parte de un empresario, aunque negó que fuera procedentes del Benfica o con la condición de ayudarlos.
¿Qué hizo el Benfica en el escándalo de soborno?
La investigación dicta que una empresa llamada Best for Business recibió casi 2 millones de euros procedentes del Benfica y ellos, a su vez, habrían transferido esa suma en parcialidades al árbitro Bruno Paixao mientras estaba en activo para presuntamente influir en los resultados de los partidos.
Esta compañía, del empresario José Bernardes -acusado en la operación "Saco Azul" (que en portugués se puede traducir como "Caja B" o "Bolsa azul")-, habría recibido esa millonaria cantidad del Benfica por "servicios de consultoría ficticios".
La declaración del árbitro señalado de corrupto
El nazareno implicado negó en declaraciones a medios lusos haber recibido pagos del club y aseguró que fue una coincidencia haber sido contratado por esta empresa relacionada con el club, explicando que sí conoce a José Bernardes, pero que su convivencia fue "estrictamente laboral" porque se le contrató para "implementar un sistema de control de calidad".
Por otra parte, el departamento jurídico del Benfica aseguró en un comunicado que "nuestros representantes legales nunca fueron confrontados con ningún hecho que envolviese el nombre del Señor Bruno Paixao y/o ninguna acusación de corrupción deportiva".