- Monterrey ligó su segunda victoria como visitante
Enmudeció el palenque cuando Querétaro volvió a caer, después de tres cuchilladas de Monterrey, el Gallo no se pudo levantar, el pico estaba clavado en el césped, la mirada se había perdido, la esperanza se les esfumó. Carlos Reinoso no pudo hacerlo cantar, el "Maestro" tuvo que vivir su primera derrota al frente del equipo queretano que terminó por significar el séptimo partido sin ganar. Monterrey fue implacable, pese a que Víctor Manuel Vucetich con un fuerte abrazo le dio la bienvenida a Reinoso una vez más a Primera División, su equipo fue severo y cruel en tierra ajena y con goles, de Luis Pérez, Carreño y Aldo De Nigris, dejó el marcador 1-3. El fantasma del descenso se convirtió en una sombra para Querétaro quien lleva dos puntos de 21 posibles y tendrá que comenzar a luchar contra corriente y trabajar a conciencia para visitar en la Jornada 8 al equipo de La Comarca: Santos Laguna. Monterrey con 14 puntos recibirá al Atlante la próxima semana; por lo pronto el equipo rayado ya se instaló, de manera momentánea, en el primer lugar del Grupo 2.
EL PARTIDO La ilusión que generó Carlos Reinoso en Querétaro fue tal que los lugareños casi abarrotaron La Corregidora. El "Maestro" había llegado apenas unos días antes para trabajar un equipo que no encontró el rumbo bajo las órdenes Héctor Medrano, el hombre que logró llevarlos a Primera División, pero que no pudo hacer cantar al Gallo. El equipo trató entonces de pararse con personalidad ante Monterrey, pero Rayados de inmediato le marcó la pauta y al minuto 13, en tiro libre directo, Luis Pérez sacó un disparo potente que Carlos Bossio apenas logró evitar tras estirarse más de la cuenta. El Gallo de inmediato comprendió que un cambio en la mentalidad del equipo no sería suficiente, que para ganar había que hacerlo con argumentos futbolísticos, no sólo había que luchar y correr, también tendría que tocar, que aguantar y defender con decencia. Pero todos los consejos que recibieron durante la semana de Carlos Reinoso se esfumaron de inmediato. Cano abrazó dentro del área a De Nigris, el delantero rayado intentó hacer el gol, pero el abrazo del defensa queretano fue tan evidente y fuerte que Escobar no dudó en marcar la pena máxima. Luis Pérez se paró con seguridad, un par de pasos detrás del manchón penal, cuando el reloj marcó el minuto 25. Entonces dio posos cortos, pero con seguridad y de pierna derecha mandó el esférico al costado izquierdo del arquero queretano, Bossio había sido engañado pues se lanzó al lado contrario. En siete juegos la defensa registraba 14 goles en contra, un promedio temeroso para un equipo que busca permanecer en el Máximo Circuito. El gol de Querétaro no tardó demasiado en llegar, apenas se logró siete minutos después. Se logró a base de ganas, pero también de futbol, pues en una jugada ensayada, Vila metió un centro al área que Diego Chaves peinó enviando hasta el fondo de la red. El primer tiempo se escapó y Reinoso no perdió ni un segundo para charlar con su equipo y tratar de hacerlo reaccionar. Pero fue hasta el 69' cuando el equipo de los Gallos volvió a tener una opción clara; Roma remató dentro del área, pero el esférico salió con mucha debilidad. Pero la muerte del Gallo estaba pactada y La Corregidora terminó por enmudecer, cuando Carreño se levantó en el área, después de que se cobró un tiro de esquina, su remate de cabeza fue potente y directo a la red de Bossio, el 1-2 se decretó al 70' y el tiro de gracia al 78' cuando Carreño sirvió para Aldo De Nigris quien resolvió con un disparo cruzado que terminó por marcar la quinta derrota de Querétaro y el séptimo juego sin ganar.
ARBITRAJE Julio David Escobar. Regular debido a que fue muy rigorista con los dos equipos, aunque tomó una buena decisión cuando amonestó a Baloy por abrazar a un jugador de Querétaro, dentro del área, el balón no estaba en juego, pero los jugadores locales pidieron que se marcara penal; sin embargo el silbante no contestó a sus quejas.