Gallos, contra la historia en Monterrey
Si los Gallos desean mantener vivas sus esperanzas de alcanzar la Liguilla hasta la última jornada, hoy es ganar sí o sí, algo que no han podido hacer a lo largo de su historia.
- Desde 1980 el conjunto queretano no ha podido ganar en la Sultana del Norte
- De 17 enfrentamientos que hubo en el Tec, Rayados ganó 15 y se registraron dos empates
Por primera vez Querétaro pisará la cancha del Estadio BBVA Bancomer, intentando realizar lo que le ha resultado imposible durante 35 años: ganar en suelo regiomontano.
Si los Gallos desean mantener vivas sus esperanzas de alcanzar la Liguilla hasta la última jornada, hoy es ganar sí o sí, algo que no han podido hacer a lo largo de su historia con ninguna de las franquicias que han tenido los queretanos, pues ni Atletas Campesinos, Cobras, TM Gallos Blancos y ahora Querétaro FC, pudieron salir victoriosos ante Rayados en el viejo Tecnológico.
Los de Víctor Vucetich visitarán por décimo octava ocasión la Sultana del Norte, de donde los 17 encuentros anteriores se han llevado 15 derrotas y en dos veces rescataron el empate, en las temporadas 1991-1992 por marcador de 1-1 y en el Apertura 2006 con una igualada a dos goles.
En esos 17 enfrenamiento, Rayados tiene absoluto dominio sobre Gallos con 39 goles a favor y apenas 13 en contra, siendo el triunfo albiazul más abultado hasta el momento en el Clausura 2012, cuando el Monterrey goleó 4-1 a Gallos con anotaciones de Darvin Chávez, César Delgado y un doblete de Aldo de Nigris, mientras que por los visitantes descontó Isaac Romo; en ese torneo la Pandilla era dirigida por Víctor Manuel Vucetich, estratega que hoy llega al frente del equipo de azul y negro.
Así hoy Vucetich al frente de Querétaro tratará de seguir haciendo historia, pero ahora en contra de Monterrey, equipo en el marcó una era dorada con cinco títulos, dos Ligas y tres Concachampions, al tratar de convertirse en el primer timonel que lleve a Gallos Blancos a conocer lo que es ganar frente a Rayados en la nueva casa albiazul y de mantener la posibilidad de meterse a la fiesta grande.