- El inmueble todavía no se llena
Las horas previas al partido de esta tarde entre Gallos Blancos y Rayos en Querétaro, han sido de nerviosismo, tensión y hasta preocupación por parte de los aficionados locales. Y es que la gente sabe lo que se disputarán esta tarde en el Estadio La Corregidora: prácticamente la permanencia de su equipo en Primera División, pues de vencer al Necaxa, solo una catástrofe impediría que los de Aguascalientes vuelvan a la Liga de Ascenso. "Estamos conscientes, se están jugando el descenso, si ganan ahorita los Gallos, casi casi nos salvamos, pero si pierden... por eso estamos nerviosos", expresó Francisco Martínez, aficionado de 37 años de edad que siempre ha seguido al Querétaro tanto en el Máximo Circuito como en la de ascenso. También los taxistas y camioneros -y en general la mayoría de los habitantes de Santiago de Querétaro-, no hablan de otra cosa más que del partido de hoy. Unos lo verán por televisión en su casa, otros en algún bar o restaurante, y otros, como el taxista Rogelio Robles, lo escuchará por radio. "Esperemos que no pase lo de hace una semana, porque ahora si contra el Necaxa no podemos perder, en este juego nos jugamos mucho", comentó el conductor del coche de alquiler. A falta de 20 minutos para que arranque el partido, La Corregidora registraba una entrada de casi el 50 por ciento de su capacidad, y dificilmente se llenará, pues la Directiva no realizó ninguna promoción para que se registrara un lleno total cuando más le hace falta al equipo. Hasta el momento no se ha registrado ningún brote de violencia fuera ni dentro del estadio, toda vez que las barras locales ya se encuentran instaladas en La Corregidora, mientras que la de Necaxa todavía no hace su aparición.