‘Platini valía su millón’; Blatter justifica el salario del exjugador francés
Sepp compareció este jueves en Suiza por las acusaciones de fraude.
Michel Platini "valía su millón" de francos suizos al año, aseguró este jueves el antiguo presidente de la FIFA Sepp Blatter, afirmando "no entender" por qué comparece en Suiza por fraude junto a su antiguo asesor.
"Simplemente tenía a ese hombre conmigo y él valía su millón", declaró el antiguo dirigente del futbol mundial, de 86 años, fatigado al término de la audiencia el miércoles pero en forma para su audiencia un día después ante el Tribunal penal federal de Bellinzone.
De la misma forma que desde la apertura de esta investigación en 2015, Blatter aseguró haber aceptado de forma oral la remuneración reclamada por el tres veces Balón de Oro, cuando el suizo se apoyó en su aura deportiva para ponerse al frente de la FIFA en 1998, antes de convertirlo en su asesor.
"Cuando fui elegido como presidente de la FIFA teníamos un mal balance. Pero me dije que un hombre que había estado en el futbol podía ayudarnos, a la FIFA y a mí mismo", explicó.
Michel Platini "me dijo 'valgo un millón'. Yo le dije: 'Pues tú estarás conmigo por un millón'", añadió Blatter, quien tuvo que dimitir en 2015 por un vasto escándalo de corrupción, y que después fue excluido del futbol.
La fiscalía acusa a Blatter de haber aprobado a comienzos de 2011 una factura de 2 millones de francos suizos (1,8 millones de euros), presentada a la FIFA por Michel Platini, entonces presidente de la UEFA, cerca de nueve años después del final de su trabajo como asesor entre 1998 y 2002.
Sin embargo, no sólo los dos hombres no habían firmado nunca un acuerdo que estableciese ese salario, sino que su único contrato escrito en 1999 fijaba ya una remuneración anual de 300.000 francos suizos, íntegramente pagados en la época por la FIFA.
Una vez más, Sepp Blatter aseguró haber acordado con Platini un pago "más adelante", cuando las finanzas de la FIFA lo permitiesen, en un "acuerdo de caballeros" sin testigos.
"Es un salario que se le debía", insistió el suizo, quien lamentó estar sufriendo "siete años de castigo, una eternidad".