¿Qué fue de Robinho? El nuevo Pelé que se quedó en promesa
Robinho, que alguna vez fue llamado a tomar el lugar dejado por Pelé, es una de las tantas promesas que nunca logró consolidar una carrera firme en el futbol.
Cuando debutó con Santos en 2003 el mundo entero comenzó a decir sobre él que tenía todo para ser la próxima gran joya brasileña. Incluso hubo quienes fueron más lejos y decían que podía ser el nuevo Pelé. El mismo Edson Arantes do Nascimento dijo: "Tiene condiciones para ser mejor que yo". Y en efecto, Robson de Souza, más conocido en las canchas como Robinho, parecía tener todo para ser uno de los jugadores más destacados del planeta.
En 2005, cuando apenas tenía 21 años, fichó con el Real Madrid a donde llegó como una firme promesa que casi cambiaría la historia del club merengue. El brasileño tuvo partidos destacados, donde brilló gracias a su habilidad y atrevimiento para hacer jugadas de fantasía, pero nunca pudo consolidase como la estrella que se esperaba de él.
Tres años después de su llegada a Madrid fue traspasado al Manchester City. En su primer año como Citizen hizo 14 goles y fue un jugador valioso para su nuevo equipo, pero nunca tuvo una buena relación con su entrenador y terminó saliendo de Inglaterra para volver al Santos de Brasil durante una breve temporada.
Robinho estaba dispuesto a triunfar en Europa, así que en 2010 volvió al Viejo Continente, en específico al AC Milan de Italia donde coincidió con jugadores como Kevin-Prince Boateng y Zlatan Ibrahimović. Sin embargo, no le alcanzó para convertirse en un futbolista estelar y de nuevo volvió a su país con Santos por los siguientes seis meses.
Para la campaña 2015-16, Robinho eligió la liga de China como punto de refugio para seguir con su carrera. En China deleitó a los aficionados con sus jugadas de fantasía y su estilo tan propio de jugar. Con este equipo disputó el Mundial de Clubes, quedando eliminado por el Barcelona.
Pero fiel a su estilo de no echar raíces, el brasileño dejó Asia y regresó a Brasil. Los siguientes años los pasó en el Atlético Mineiro. Robinho tuvo a la fanaticada de su equipo en el bolsillo y se convirtió en uno de los jugadores más queridos del campeonato brasileño. Lamentablemente una acusación de abuso sexual en su contra manchó su vida y su carrera. El hecho se remonta a su época como jugador del Milan en 2013.
Finalmente el 23 noviembre de 2017 el jugador fue condenado a 9 años de cárcel por violencia sexual. Por diversas razones legales, el jugador no ha sido realmente condenado a pasar ese tiempo en la cárcel y permanece en libertad.
A la par de su problema legal, Robinho llegó al Sivasspor de la liga turca en 2018, equipo en donde apenas duró una temporada. A sus 36 años actualmente juega para el İstanbul Başakşehir. Robinho es una de las varias joyas mundiales que se fueron extraviando en el camino y nunca logró lo que tanto se habló acerca de él.
Actualmente existen noticias que apuntan al deseo del jugador por regresar a Santos por cuarta vez en su carrera para retirarse.
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