Con 16 años cumplidos, Rayan Cherki empieza a mostrarse como una de las máximas promesas del futbol francés, e incluso ya los gigantes del futbol europeo, como Real Madrid, Barcelona, Manchester United, entre otros, ya lo siguen de cerca. 

El sábado, el joven nacido en la localidad de Pusignan regaló una actuación de gran calidad que le valió al Olympique de Lyon para superar a Nantes por 4-3. Dos goles fueron suyos y dio dos asistencias para redondear el marcador, además de que provocó un penal que fue fallado.

​Esa exhibición le valió para ir directo a la portada de diarios importantes en su país, como L'Equipe, además de que llevó a la superestrella Kylian Mbappé, otro jugador que atrajo los reflectores desde muy joven, a destacarlo.

"No deberían hablar demasiado sobre su edad", escribió Mbappé en su cuenta de Twitter, enterado del partidazo que dio Cherki, un jugador de ascendencia argelina, como Zinedine Zidane.

Progreso constante

Con solo 16 años y 2 días de edad, Cherki debutó en la Ligue 1 el 19 de octubre de 2019, contra Dijon, tras mostrarse como un jugador muy por arriba en calidad respecto a los jugadores de su edad. El técnico Rudi García lo metió al minuto 83 en sustitución de Maxwel Cornet para dar inicio a una carrera que promete mucho.

El estratega había sido enterado del gran potencial del jugador, el cual quedó manifiesto con las categorías inferiores de la Selección de Francia  y con el propio Olympique Lyon, en donde constantemente ha brillado. 

Por poner un par de ejemplos de lo mencionado, Cherki se convirtió en el jugador más joven en marcar en la Youth Champions League (liga para menores de 19 años a nivel europeo) con 15 años y 33 días, además de que fue capaz de realizar un triplete en cinco minutos ante Auxerre en la categoría Sub 19.

"Se había hablado mucho de su potencial y de su inmenso talento, a mitad de camino entre Benzema y Ben Arfa", escribió el diario L'Equipe.

Amarrado hasta 2022 

El potencial de Cherki no ha pasado de largo para los grandes clubes de Europa, lo que llevó a la directiva del Lyon a amarrarlo al menos hasta 2022 para evitar que salga de la institución, salvo que venga un bombazo imposible de rechazar. 

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