Humillación histórica de Argentina a Italia en la Finalissima y México tiembla
Más vale que el Tata Martino y la Selección Mexicana hayan prestado atención, porque el rival del Tricolor en Qatar 2022 le dio un paseo a Italia en Wembley.
Esperemos que Gerardo Martino y toda la Selección Mexicana hayan prestado atención a la exhibición de uno de sus rivales en la próxima Copa del Mundo, porque fue avasalladora. Este miércoles, Argentina le dio un baile a Italia que terminó 3-0 y bien pudo ser por el doble de goles en el mítico Estadio de Wembley, donde los sudamericanos fueron una avalancha en la cancha y la tribuna.
La Scaloneta no tuvo problemas para llevarse el triunfo sobre la cancha de Wembley, ante un cuadro italiano dirigido por Roberto Mancini, que después de ganar la Euro 2020 ha tenido que enfrentarse a un nuevo fracaso, luego de quedar fuera de la Copa del Mundo Qatar 2022.
Lionel Messi, brillando como no se le ve en el PSG, siendo el tipo que marca diferencia con los ritmos y tiempos del juego. No como goleador, aunque se cansó de buscarlo, pero sí asistiendo a sus compañeros por el bien de la Albiceleste, que luce imparable rumbo a Qatar 2022, donde se enfrentará al Tricolor el 26 de noviembre en el segundo duelo de la Fase de Grupos.
Precisamente de una gran jugada de Leo surgió el 1-0 de Argentina que firmó Lautaro Martínez, el Killer del Inter de Milán, al minuto 28. El camiseta 10 cubrió la pelota como mago y, en una fracción de segundo, aceleró a tope casi hasta línea de fondo para centrar y encontrar sin marca en el área al Toro, quien solamente la empujó.
El paseo por fin se reflejaba en el marcador y si algo ha caracterizado a esta Argentina de Lionel Scaloni es saber golpear al rival en los momentos clave del juego. Para muestra el 2-0 marcado por Ángel di María en el agregado del primer lapso, dejando atrás en carrera a su marcador y definiendo con su inconfundible vaselina ante la salida de Donnarumma, quien más adelante le sacaría otras dos opciones al Fideo que lucían como golazos.
Messi buscó su gol por todos lados, incluso de derecha, pero la suerte no le sonrió, aunque sí como pasador para el 3-0 de Paulo Dybala, quien tenía escasos tres minutos en la cancha, cuando puso la pelota en la base del poste al minuto 94 para darle cerrojazo a la fiesta sudamericana en Wembley, al grito de "Y ya lo ves, el que no salte es un inglés".