Público de Tepa vibró y se portó a la altura en duelo del Tri femenil
Hubo presencia de jugadoras en las tribunas del estadio para el partido entre México y Argentina.
Fue su primer evento “grande”, recibieron la visita de la Selección Femenil mayor y el público duque acudió el Estadio Tepa Gómez se portó a la altura.
En territorio alteño atrás quedó el grito homofóbico y las faltas de respeto, pues el público hizo una muy buena entrada y apoyó al estilo “antiguo” al Tri, que en la cancha le regaló una goleada de 6-1 sobre Argentina.
Así se vivió el México vs Argentina
Antes del silbatazo inicial, la capitana, Kenti Robles pidió que no se hiciera presente el grito catalogado por FIFA como homofóbico.
Esto lo entendió el público alteño que apoyó con aplausos y gritos.
Apareció la famosa ola en las gradas, y siempre hubo aplausos, incluso para la portera, Emily Alvarado, que falló en el gol de Argentina comenzando el encuentro. “Portera, portera”, gritó el público local.
Con el correr de los minutos y tras los goles de México hubo más aplausos, en la zona de sol apareció el “Y dónde están, y dónde están, las argentinas que nos iban a ganar”, para prender un poco más el ambiente.
Después, en la parte de sombra se escuchó un “Messi, Messi, Messico, México”, lo que causó la risa de varios seguidores.
Playeras de Chivas, Atlas, Tigres y Rayados las que más se vieron en el Tepa Gómez. En la parte final apareció también en “Siete, siete”, pidiendo otro gol de México.
En la tribuna, no solamente hubo aficionados, sino gente de fútbol como el DT de Chivas femenil, Edgar Mejía y su equipo de trabajo. También estuvo Norma Palafox, actual jugadora del Pachuca. En uno de los palcos estuvo Manuel Vidrio, exjugador del Guadalajara.
La comunión no fue solamente con la afición ya que en la cancha, Mónica Vergara, timonel azteca mostró tener una gran relación con sus jugadoras. Antes del encuentro, saludó de mano a sus elementos suplentes.
En un tiempo de hidratación ayudó a entregar toallas para que las jugadoras se secaran el sudor.
La comunión se notó tanto que las jugadoras que salieron de cambio le abrazaron como señal de agradecimiento en una tarde mágica para el Tri femenil, al que despidieron entre aplausos y con el Cielito Lindo. El Tri agradeció dándole la vuelta al estadio desde la cancha.