Un ‘Cielito Lindo’ con gaitas engalanó al Estadio Azteca
Muy a la escocesa, una de las canciones más representativas de la pasión por la Selección Mexicana, se escuchó previo a la ceremonia de los himnos nacionales.
Estadio Azteca /
Un muy emotivo y diferente protocolo fue el que se efectuó antes del silbatazo inicial entre México y Escocia, ya que antes de los himnos nacionales, las gaitas engalanaron al Coloso de Santa Úrsula y deleitaron al público presente entonando el Cielito Lindo, a lo cual la orquesta del Ejército Mexicano le siguió con clarinetes y las voces de cada uno de sus componentes.
Además, para el himno nacional de Escocia, fueron las mismas gaitas las que lo las entonaron, gracias a un grupo de músicos tradicionales de ese país, quienes estuvieron presentes para el juego de despedida de la Selección Mexicana.
Como es costumbre, para el himno nacional mexicano, se desplegó una enorme bandera de nuestro país, al tiempo que la orquesta del ejercito lo entonó, generando así un momento muy emotivo tanto para la afición como los jugadores que cantaron con orgullo el himno.
Al final del himno y ya con el lábaro patrio desplegado, estallaron serpentinas con los colores nacionales, lo cual culminó el protocolo con el que la afición mexicana se le entregó por completo al conjunto nacional, esperando poderlo despedir con un triunfo ante los escoceses.
Además, para el himno nacional de Escocia, fueron las mismas gaitas las que lo las entonaron, gracias a un grupo de músicos tradicionales de ese país, quienes estuvieron presentes para el juego de despedida de la Selección Mexicana.
Como es costumbre, para el himno nacional mexicano, se desplegó una enorme bandera de nuestro país, al tiempo que la orquesta del ejercito lo entonó, generando así un momento muy emotivo tanto para la afición como los jugadores que cantaron con orgullo el himno.
Al final del himno y ya con el lábaro patrio desplegado, estallaron serpentinas con los colores nacionales, lo cual culminó el protocolo con el que la afición mexicana se le entregó por completo al conjunto nacional, esperando poderlo despedir con un triunfo ante los escoceses.