Napoli pierde frente a la Lazio y se complica el inicio: 1-2
Lazio se levantó de dos derrotas y venció al Napoli, que sufre su primer descalabro.
Derrotado en las dos primeras jornadas, el Lazio resurgió con esplendor, efectivo, expresivo y ganador 1-2 en el campo del actual campeón, el Napoli, al que soportó primero y al que doblegó después, liderado por el talento de Luis Alberto, que marcó un golazo y provocó otro, y de Felipe Anderson, que completó un partido magnífico, ambos decisivos para el triunfo del conjunto romano.
La primera media hora del equipo napolitano fue imponente. Kvaratskheila fue un ciclón. Su comienzo fue trepidante. Corrió, regateó, condujo, desbordó, vio más que nadie, ejecutó a toda velocidad, combinó, disparó con suma potencia... Recién salido de una lesión, fue cambiado superada la hora de partido. Pero también lo es Zielinski, un portento. Un llegador preciso e insistente.
Lazio, subcampeón de la pasada temporada de la Serie A, sufrió su puesta en escena, devorado inicialmente por la presión asfixiante con la que el conjunto local (hoy de negro, el equipo romano jugó de blanco, ninguno con sus colores coincidentes celestes originales) planteó un partido de vértigo, de ritmo insoportable, sin una sola pausa, ni una concesión. No le permitió casi nada.
El 0-1 cayó al borde de la media hora. Felipe Anderson, con el balón pegado al pie casi siempre, con un regate concluyente, soltó un maravilloso pase con el exterior al solitario Luis Alberto, que definió de la única forma que podía hacerlo dentro del área, con una delicia de taconazo que batió a Meret y dejó con la boca abierta al estadio.
Una genialidad del Lazio. Un accidente del Napoli que, realmente, había sido mucho mejor hasta entonces sobre el terreno. En su peor oportunidad de todas, un tiro mordido de Zielinski, encontró el gol a la siguiente jugada, con un doble rebote en los defensas del Lazio que cambió la trayectoria, que descolocó al portero y que terminó en el 1-1 en un instante.
Sin embargo, Felipe Anderson defendió y atacó hasta que consiguió el 1-2 en el 52. El pase iba para Luis Alberto. El español, con toda la clase del mundo, la dejó pasar entre sus piernas para Kamada, que se abrió hueco hasta que conectó con el gol. Dos remates, dos tantos. Felipe Anderson y Luis Alberto, involucrados en los dos.