Napoli recibió un baño de humildad con humillante goleada ante Milan: 0-4

Chucky Lozano entró de cambio, pero no marcó diferencia a favor del líder.

El delantero portugués se despachó con un par de goles. Foto: (Reuters)

El Napoli fue un auténtico desastre ante Milan, que se metió al Estadio Diego Armando Maradona y humilló al líder de la Serie A con una contundente goleada 4-0, que incluyó un doblete de Rafael Leao; todo mientras Chuky Lozano apenas jugó poco más de 25 minutos.

Aunque los napolitanos tienen casi el Scudetto en la bolsa, este partido donde se jugaban el orgullo frente a su afición los ha dejado en ridículo pues no pudieron conseguir goles a favor.

En cambio, el Milan tuvo a Brahim Diaz el jugador que prácticamente le dio un baile a la defensa de los napolitanos y como muestra el primer gol a los 16 minutos, luego de que Brahim Diaz le puso un pase filtrado a Leao, quien definió con un globito ante la salida del portero Meret.

Brahim pisaba la pelota, le daba pausa al juego e impulsaba el ataque de sus compañeros. Incluso remataba a gol como el segundo tanto de los rossoneri a los 24 minutos tras aprovechar un centro por izquierda de Bennacer. El 10 rossonero recibió en el área y dribló de forma espectacular a Mário Rui antes de definir el 2-0.

Napoli intentó lanzarse al frente, pero cometió errores como el del 58’ cuando Tonalli recuperó el balón y lanzó a Leao con un pase largo. El delantero se encargó del resto para definir el 3-0.

Ya medio resignado, Spalletti decidió mandar al terreno de juego a varios elementos, entre ellos a Hirving 'Chucky' Lozano, quien realmente no tuvo una opción clara que lamentar, aunque mostró ganas.

Tan mal lo hizo la defensa que el belga Alexis Saelemaekers anotó su propio golazo 'estilo Maradona' tras llevarse a varios jugadores, entrar al área, y ante la salida de Meret le definió con un disparo entre las piernas para cerrar el 4-0.

El Napoli sigue líder de la Serie A con sus 71 puntos, mientras que el Milan se llegó a 51 unidades y con la satisfacción de haber manchado con una goleada, el camino del Campeón.


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