Laurel Hubbard es la primera deportista transgénero en Olímpicos, aunque le fue mal

La deportista, de 43 años y nacida varón, pero que se convirtió en mujer tras cumplir los 30, compitió en el Levantamiento de Pesas.

Laurel Hubbard nació hombre, pero se convirtió en mujer y así compitió en Tokio 2020. (AFP)

Este lunes se hizo historia en los Juegos Olímpicos con la participación de la primera deportista transgénero. Se trata de la halterista Laurel Hubbard, de Nueva Zelanda, quien para su mala suerte no pudo levantar ninguna de las pesas en la competición de +87 kg y fue eliminada.

Hubbard, quien tiene 43 años, nació hombre pero se convirtió en mujer cumplidos sus 30, empezó su concurso con una barra de 120 kilogramos y después una segunda y tercera de 125, pero no acertó con ninguna de sus tentativa, por lo que quedó fuera de la Final.

Apoyo y críticas a Hubbard por ser atleta transgénero

La presencia de Hubbard en la Halterofilia de Tokio 2020 suscitó un debate, después de cumplir con los criterios del Comité Olímpico Internacional (COI), centrándose en que la neozelandesa se beneficia de otras ventajas ligadas a su pasado como hombre, lo que hace que su presencia sea injusta de cara a otras competidoras.

La gente que apoya a Hubbard cree que clasificarse para los Juegos representa una victoria para la inclusión y los derechos de las personas transgénero.

El debate sobre este tema es intenso y en ocasiones apasionado, especialmente en internet, lo que ha llevado al Comité Olímpico de Nueva Zelanda a tomar medidas para proteger a Hubbard de los trolls de las redes sociales.

NOTAS MÁS VISTAS