Felipe González, el niño regio que cumplió sueño de jugar en Sultanes
El lanzador busca ser parte de la rotación de abridores y ganarse un lugar en Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Originario de Guadalupe, Nuevo León, Felipe González siempre tuvo un sueño desde niño, el jugar con Sultanes de Monterrey.
González lo cumplió, después de varios años en Estados Unidos en Ligas Menores, logró ser parte del club regiomontano y ahora su siguiente meta es ganarse un lugar en la rotación abridora del equipo, sin perder de vista su otro objetivo: Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
“Desde chiquito iba con mi papá, con mi familia, veía a todas las figuras de Sultanes y pues claro, uno sueña con jugar en el equipo de su ciudad”, indicó González.
“Me siento muy cómodo en la organización, otra temporada más; me estoy preparando fuerte para estar en la rotación abridora, quiero ser abridor aquí, en mi ciudad. Era abridor en Estados Unidos, llegué aquí y me convertí en relevo, pero quiero ser abridor, es lo que me gusta”, dijo el lanzador que llegó a Sultanes en 2018.
González ha mantenido buenas actuaciones como relevo 4-4, 2-3 y 3-0 han sido sus números en ganados y perdidos con Monterrey en las dos temporadas del verano que se dieron en 2018 y la del 2019; mientras que 4.40, 4.45 y 3.22 son los números que arrojó en carreras limpias admitidas.
Este elemento de los regios sabe que haciendo una buena labor con su escuadra en la Liga Mexicana del Verano podrá ir con la Selección Mexicana a los Juegos Olímpicos, por lo que no dudó en reportar pronto con Sultanes para ser de los mejores abridores de la escuadra norteña.
“Contento de conseguir en boleto contra Estados Unidos y ojalá pueda representar a México en los Olímpicos”, indicó.
El serpentinero duró 10 años en Norteamérica, luego de que surgió en la Liga Pequeña Mala Torres; estuvo en las sucursales de Ligas Menos desde los 16 años con Yanquis de Nueva York, Piratas de Pittsburgh, Dodgers de Los Ángeles y Marlines de Miami.
En el Pacífico ha jugado con Naranjeros de Hermosillo, Tomateros de Culiacán, Venados de Mazatlán y Charros de Jalisco. Hoy a sus 28 años desea triunfar con el equipo de casa, con quien soñó desde niño.