Chabelo, un defensor a ultranza de la lucha libre: ‘Los invito a entrenar’ | VIDEO

Uno de los personajes icónicos del pancracio habla para Sin Máscaras de cómo nació su gusto, pasión y amor por el deporte de los costalazos.

Chabelo, en entrevista con Sin Máscaras | César Cerón

A los 45 años, y ya con toda la pasión y amor por su lucha libre a flor de piel, Jesús Ornelas decidió dar el siguiente paso, ese en el que pudo palpar lo que era realmente hacer todas las peripecias que están inmersas en esta actividad.

Chabelo, como es conocido en el argot, con conocimiento de causa, porque pudo sentir lo que era un día en modo esteta, comparte para Sin Máscaras acerca de este idilio que desde chaval tuvo con el pancracio, y de paso les deja un mensaje a los detractores, a esos mismos que hablan de teatro, faramallas, o hasta 'payasos'.

Cortan listón del Túnel Arena México, enclavado frente a La Catedral


“Yo respeto a todos los luchadores, mis respetos en general; lo que la gente piensa de la lucha libre, pues yo los invito a un entrenamiento, vayan a entrenar, y después hablen lo que quieran, porque es muy fácil estar de espectador y criticar, estar en una plataforma y criticar, para que puedan emitir una opinión real, de si lo están haciendo bien o mal, emitir una crítica que sea de calidad, hay que conocer las entrañas. La lucha libre mexicana es la mejor del mundo”.

De hecho, y detallando sobre lo que fue practicar esto de los costalazos, lanza que, aunque lo hizo como una manera de acondicionamiento, pues ser parte del segmento ya no estuvo en su lista de pendientes, entendió que los deportistas que siempre admiró, están hechos de una sola pieza.

“Se me mete la locura, y después de no hacer ejercicio, deporte, primero practiqué boxeo con mi compadre Jhonny González (boxeador), y después surge la inquietud de entrenar lucha libre, y tengo la fortuna de hacerlo con alguien de la vieja escuela, con mi profesor Cuchillo, y ahí empieza una andanza; este tipo de entrenamientos, hay que pasar un filtro, que te digan si vas a durar o no, pero no se refería a mí como Chabelo.
“Para el cuarto día llegué, y los demás no llegaron, y me quedé entrenando más de dos años, y de ahí surge la inquietud de ser réferi, hago mi examen y me acredito como réferi, y después de todo eso y la porra, ya viene la inquietud de crear Welcome to Mi Barrio, y seguir ayudando a que evolucione este deporte”.

¿Y cómo es que empieza esa relación con la lucha?

Chucho, de pequeño, supo que existía toda esa parafernalia, y entonces empezó a ser parte de la misma, incluso yendo a lugares para ver a sus ídolos, aunque ello derivara en tener que recorrer muchos kilómetros.

“Me tocó vivir una época diferente; desde niño te apasiona todo lo que era esto de la lucha del bien contra el mal, y esperando ver a tus héroes de carne y hueso, los luchadores de aquella época, como El Santo, Blue Demon, Mil Máscaras, toda la gente que forma esa parte de la historia con letras de oro. Avanzando el tiempo vas contra el estigma, que la lucha libre era un deporte para gente de un extracto social bajo, gente inculta, no había mucho acercamiento, para un niño o un adolescente; de joven iba al Toreo, a la Plaza Cortijo, o ir a San Luis Potosí, era una cosa de locos; no había tanta difusión, pero la pasión y el gusto siempre han existido.
“Cuando el señor Monsiváis (Carlos) dijo que le gustaba la lucha, a todos les empezó a gustar, porque además empezó a ser vista con otros ojos, desde otro ángulo, pero llega cierta edad en donde tienes libertad de hacer cosas, y empiezo a ser asiduo a la Arena Coliseo todos los martes con un grupo de gente que colabora conmigo, empezamos a asistir, y empezamos a ser conocidos, somos gritones; este deporte es catártico, le decía a mis hijas que el mejor momento para poder pedir un permiso era cuando regresaba de las luchas, esta disciplina une a la gente”.

¿Ser luchador nunca fue una opción?

Chabelo siempre lo tuvo claro, la afición se basó en eso, en admirar, en reconocer el trabajo de esos personajes que hacían suertes para el deleite del público.

Sin embargo, y aunque probó en el cuadrilátero, asevera que la idea o ilusión de ser uno de los protagonistas, no estuvo por encima de lo que para él era su deporte favorito.

“Los deportes de contacto me fascinan, la lucha libre llegó tarde a mi vida, en la cuestión de querer involucrarme y ser luchador; tuve la oportunidad de entrenar hace más de diez años, pero la lucha le dio otro giro a mi vida, y aquella idea trillada de que la edad es sólo un número, porque cuando empecé a entrenar, hacía cosas que jamás imaginé que podría hacer, y eso te da mucha seguridad.
“Era admirarlos, eran mis héroes, no tenía esa inquietud de ser luchador, ya a los 45 años, no era posible ser luchador; mis ciclos de vida han sido como tuvieron que ser, tampoco me hubiera gustado ser un luchador mediocre”.

En la siguiente entrega Jesús Ornelas habla de Taquería Chabelo, y la magia de un lugar netamente luchón…

Sin Máscaras | Chabelo


¿Qué es Sin Máscaras?

Sin Máscaras es un programa dedicado a la lucha libre, un deporte icónico de la gran nación mexicana. La tradición del pancracio es contada por los protagonistas, con entrevistas en las que puedes conocer más de tu luchador favorito. Esta emisión la puedes seguir en las plataformas digitales de mediotiempo, la propiedad deportiva digital número uno de México.

Sin Máscaras | Murder Clown



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