El irracional miedo de The Undertaker ¡a los pepinos!
Luego de tres capítulos de 'The Last Ride' dedicados a su legendaria carrera, las historias ligadas al Fenómeno de WWE surgen; ahora sobre su miedo irracional.
The Undertaker es el luchador más temido en la historia de WWE, en noviembre próximo cumplirá 30 años como gladiador en activo de la compañía y es el hombre más respetado detrás de vestidores solo por debajo de Vince McMahon, pero por increíble que parezca, el Fenómeno tiene un miedo irracional ¡a los pepinos!
Aunque en su mítica carrera ha personificado al Hombre Muerto, ese que no le teme a nada y que incluso presume poderes sobrenaturales, Mark Calaway (nombre real de The Undertaker) tiene una fobia inexplicable que le costó varias bromas de sus compañeros desde que comenzó en WWE en 1990 -entonces WWF-.
A propósito del documental The Last Ride que ha emitido tres de sus cinco capítulos en WWE Network, donde se relatan los años más recientes del Enterrador y su camino hacia el inminente retiro, el luchador concedió una entrevista al podcast Pardon My Take donde habló de su rara fobia.
"Vamos a poner esto claro, no diría que le tengo miedo a los pepinos, simplemente no me gusta verlos u olerlos. Digamos que si hoy en esta entrevista alguien entra con pepinos me voy, no importan si son en un vaso, una ensalada o un té, me voy, pero no salgo corriendo", aseguró Calaway.
¿De dónde surge el miedo de The Undertaker a los pepinos?
Al inicio de su carrera en WWE, el Fenómeno tuvo a su lado a Paul Bearer, quien fungía como su mánager a cuadro en las transmisiones y con quien desarrolló una entrañable amistad hasta su muerte en el 2013.
En una entrevista meses antes de fallecer, Bearer explicó de dónde nació este miedo que rodea el mito del Hombre del Valle de la Muerte.
"Lo vi vomitar en un restaurante, pidió un té helado y le pusieron un par de rodajas de pepino. Simplemente no lo tolera, es algo que va más allá de él. Viene desde su niñez, si mal no recuerdo fue su madre quien lo obligó a comer pepinos a diario porque le decía que era un alimento con enormes propiedades. Eso hizo que lo odiara, que incluso les tuviera miedo", contó.