El hincha de la U de Chile que se coló al podio de WRC2 en Guanajuato
Pedro Heller se subió al tercer puesto en la segunda categoría de WRC en el Rally México
León, Guanajuato. /
Su madre lo acompañó hasta Guanajuato, donde le entregó esa bandera de Chile que extendió sobre su auto tras conquistar un inesperado tercer puesto. Pedro Heller se subió por primera vez a un auto de rallies en 2015 y tres años después, logró en México su primer podio en WRC2, categoría satelital del Campeonato Mundial de Rallies.
Junto a su navegante, el argentino Pablo Olmos, Heller logró quedar a 13 minutos 53.4 segundos del ganador de la competencia, Pontus Tidemand. El mejor resultado de una carrera que supo impulsar más allá de la predilección por el futbol en su natal Chile.
“Soy hincha de la U de Chile”, dice a Mediotiempo, pero su afición no le impide ver las dificultades de su disciplina. “Sé que en casi todos los lugares del mundo el futbol es un deporte predominante, mi país no es diferencia, pero el automovilismo cada vez se abre más espacio”.
Heller tiene 29 años, pero no tiene ni tres que incursionó en los rallies. Ahora maneja un un Ford Fiesta R5 de M-Sport, el mismo equipo de Sébastien Ogier, actual campeón de WRC y ganador del Rally de Guanajuato, un salto tan grande como inesperado para el chileno.
“La primera vez que me subí a un auto de rally fue en 2015 en el campeonato nacional de Chile, apenas el año pasado entré a WRC2 en un R5 y en tan poco tiempo y pocos kilómetros hemos estado cada vez mejor que antes”, recuerda.
En México disputó su primera carrera esta temporada, pues en 2017 corrió en Argentina, Portugal, Polonia y Gales.
“Estoy feliz de que ganamos un podio en esta categoría, sumamos una buena cantidad de puntos y estuvimos con un ritmo importante. Sabemos que esto es paso a paso, tenemos mucho por avanzar y si seguimos como hasta ahora, las cosas se van a dar”, asegura.
Así como aprendió rápidamente a conducir un coche de estas características, también comprendió que las excusas no podían ser parte de su entorno si quería sobresalir. Eso mismo demostró en Guanajuato, donde la mayoría de los pilotos se quejó de las altas temperaturas.
“Estas condiciones hacen que estemos al límite todos por igual, tenemos la misma temperatura y mismo camino. Básicamente es no echar la culpa a las cosas externas y tratar de mejorar, preparados sabiendo que México es así de duro”, afirma el chileno.
“Me voy muy contento de México, por el recibimiento de la gente, quiero el año que entra volver a estar acá y poder tener un mejor resultado”, sentencia Heller, al tiempo que admite desconocer la Liga MX pese al alto número de compatriotas suyos que juegan allí.
Junto a su navegante, el argentino Pablo Olmos, Heller logró quedar a 13 minutos 53.4 segundos del ganador de la competencia, Pontus Tidemand. El mejor resultado de una carrera que supo impulsar más allá de la predilección por el futbol en su natal Chile.
“Soy hincha de la U de Chile”, dice a Mediotiempo, pero su afición no le impide ver las dificultades de su disciplina. “Sé que en casi todos los lugares del mundo el futbol es un deporte predominante, mi país no es diferencia, pero el automovilismo cada vez se abre más espacio”.
Heller tiene 29 años, pero no tiene ni tres que incursionó en los rallies. Ahora maneja un un Ford Fiesta R5 de M-Sport, el mismo equipo de Sébastien Ogier, actual campeón de WRC y ganador del Rally de Guanajuato, un salto tan grande como inesperado para el chileno.
“La primera vez que me subí a un auto de rally fue en 2015 en el campeonato nacional de Chile, apenas el año pasado entré a WRC2 en un R5 y en tan poco tiempo y pocos kilómetros hemos estado cada vez mejor que antes”, recuerda.
En México disputó su primera carrera esta temporada, pues en 2017 corrió en Argentina, Portugal, Polonia y Gales.
“Estoy feliz de que ganamos un podio en esta categoría, sumamos una buena cantidad de puntos y estuvimos con un ritmo importante. Sabemos que esto es paso a paso, tenemos mucho por avanzar y si seguimos como hasta ahora, las cosas se van a dar”, asegura.
Así como aprendió rápidamente a conducir un coche de estas características, también comprendió que las excusas no podían ser parte de su entorno si quería sobresalir. Eso mismo demostró en Guanajuato, donde la mayoría de los pilotos se quejó de las altas temperaturas.
“Estas condiciones hacen que estemos al límite todos por igual, tenemos la misma temperatura y mismo camino. Básicamente es no echar la culpa a las cosas externas y tratar de mejorar, preparados sabiendo que México es así de duro”, afirma el chileno.
“Me voy muy contento de México, por el recibimiento de la gente, quiero el año que entra volver a estar acá y poder tener un mejor resultado”, sentencia Heller, al tiempo que admite desconocer la Liga MX pese al alto número de compatriotas suyos que juegan allí.