El día que Los Cabos ‘rescató’ al Abierto de Bogotá
Pocos lo saben, pero el génesis del Abierto de Los Cabos se dio en Colombia.
Ciudad de México /
El Abierto de Bogotá se disputó en la capital colombiana desde 1977, pero su inestabilidad e intermitencia solo le permitieron celebrarse en 14 ocasiones. Fue así que Grupo Pegaso vio la oportunidad de tomar las riendas de aquel ATP 250 en busca de posicionarlo como uno de los más importantes de esa categoría.
La apuesta fue en serio, pues desde que se anunciara la compra de este torneo para trasladarlo a Los Cabos en noviembre de 2015, los organizadores pusieron manos a la obra para impulsarlo y convertirlo rápidamente en un referente en el tour, tal y como hicieron con el Abierto de Acapulco.
El Abierto de Tenis Mifel ofrece la cuarta mejor bolsa de los 250 y contará en su tercera edición con tres jugadores Top 20, de entre los que destaca Juan Martín Del Potro, cuarta mejor raqueta del mundo. Pero Los Cabos no podría disfrutar del mejor tenis del planeta, de no ser por las facilidades que otorgó Imla, la empresa que era dueña del torneo.
Este grupo inversor se encargó de regresar el tenis profesional a la capital cafetera cuando en 2012 compró los derechos del Abierto de Los Ángeles, de la mano de la mexicana Claro, propiedad de Carlos Slim, y que fue parte del nombre oficial del certamen durante sus tres únicas ediciones de 2013 a 2015.
Como Claro Open, el australiano Bernard Tomic se consagró campeón en los últimos dos eventos, mientras que el croata Ivo Karlovic alzó el cetro en 2013. Es así que Tomic se convirtió en el máximo ganador en la historia de este Abierto, junto con el paraguayo Víctor Pecci, quien también fuera bicampeón en 1978 y 1979.
En Bogotá también triunfaron históricos tenistas como el argentino Guillermo Vilas, primer campeón de este torneo, así como el ecuatoriano Nicolás Lapentti, Thomas Muster, Mariano Zabaleta y Francisco Clavet.
Pero el ambicioso plan de Grupo Pegaso y una destacada oferta para adquirir los derechos del torneo cafetero, pudo más que las ganas por hacer crecer este torneo en Sudamérica.
“Tenemos sentimientos encontrados al transferir nuestro torneo a Los Cabos donde pensamos que crecerá para ser un gran evento que represente a México internacionalmente” dijo Manuel Mate, director del torneo de Bogotá, cuando se oficializó la venta a Grupo Pegaso.
Fue así que el Abierto de Los Cabos se abrió un espacio entre los 62 torneos que conforman el calendario de la ATP, en aras de convertirse en el más importante de su categoría y emular para luego intentar superar el éxito del AMT, el más grande caso de éxito de un torneo de tenis en México.
La apuesta fue en serio, pues desde que se anunciara la compra de este torneo para trasladarlo a Los Cabos en noviembre de 2015, los organizadores pusieron manos a la obra para impulsarlo y convertirlo rápidamente en un referente en el tour, tal y como hicieron con el Abierto de Acapulco.
El Abierto de Tenis Mifel ofrece la cuarta mejor bolsa de los 250 y contará en su tercera edición con tres jugadores Top 20, de entre los que destaca Juan Martín Del Potro, cuarta mejor raqueta del mundo. Pero Los Cabos no podría disfrutar del mejor tenis del planeta, de no ser por las facilidades que otorgó Imla, la empresa que era dueña del torneo.
Este grupo inversor se encargó de regresar el tenis profesional a la capital cafetera cuando en 2012 compró los derechos del Abierto de Los Ángeles, de la mano de la mexicana Claro, propiedad de Carlos Slim, y que fue parte del nombre oficial del certamen durante sus tres únicas ediciones de 2013 a 2015.
Como Claro Open, el australiano Bernard Tomic se consagró campeón en los últimos dos eventos, mientras que el croata Ivo Karlovic alzó el cetro en 2013. Es así que Tomic se convirtió en el máximo ganador en la historia de este Abierto, junto con el paraguayo Víctor Pecci, quien también fuera bicampeón en 1978 y 1979.
En Bogotá también triunfaron históricos tenistas como el argentino Guillermo Vilas, primer campeón de este torneo, así como el ecuatoriano Nicolás Lapentti, Thomas Muster, Mariano Zabaleta y Francisco Clavet.
Pero el ambicioso plan de Grupo Pegaso y una destacada oferta para adquirir los derechos del torneo cafetero, pudo más que las ganas por hacer crecer este torneo en Sudamérica.
“Tenemos sentimientos encontrados al transferir nuestro torneo a Los Cabos donde pensamos que crecerá para ser un gran evento que represente a México internacionalmente” dijo Manuel Mate, director del torneo de Bogotá, cuando se oficializó la venta a Grupo Pegaso.
Fue así que el Abierto de Los Cabos se abrió un espacio entre los 62 torneos que conforman el calendario de la ATP, en aras de convertirse en el más importante de su categoría y emular para luego intentar superar el éxito del AMT, el más grande caso de éxito de un torneo de tenis en México.