Murmurando canciones para calmar los nervios, Quezada logró su tiro de Oro
Con 18 años de edad, Karen dominó la prueba en la que Alejandra Zavala destacó en Río de Janeiro 2016.
Barranquilla, Colombia /
Experiencia contra juventud, ese fue el duelo de este viernes en la sede de tiro deportivo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018. Por un lado, Alejandra Zavala, quien participa por quinta vez en la justa, y por el otro, Karen Quezada en su primera vez. La juvenil de 18 años desplazó a Ale Pistolas.
"Al principio me sirvió que hice muchos puntos de colchón para seguir en la competencia y ese penúltimo tiro fue bastante acertado porque sabía que ya tenía segura la de Oro", narró respecto al penúltimo disparo que la sorprendió al ver la marca justamente en el centro. Así dejó sin posibilidades a Zavala.
Los nervios la invadieron desde el comienzo de la jornada, sin embargo, se portó como toda una experta y acumuló la mayor cantidad de puntos para colocarse siempre arriba.
Karen estaba colocada en la mesa B y Alejandra en la D, ambas cercanas, pero lejanas al convertirse en rivales por las preseas. La experimentada en la modalidad se vio concentrada y unos audífonos la aislaron un poco, mientras que Karen no portó nada para aislarse del rudio y escuchó cada porra, grito y suspiro de los asistentes.
En los momentos de presión, la joven comenzaba a cantar fragmentos de algunas canciones, sus labios la delataron murmurando las piezas que se le vinieron a la mente previo a colocar la pistola y disparar.
"Es mucho nervio y mucha presión tener a todos ahí porque tienes que dar un resultado, pero también es la emoción y el disfrute de que estás haciendo algo que te gusta y demostrando lo que todos los días entrenas. Es una combinación que hace que sientas todo muy movido (el estómago)".
Una vez definido todo, celebró con un fuerte abrazo de Zavala e inmediatamente tomó el celular. Del otro lado estaba Alfredo Castillo, director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte para felicitarla; el directivo no viajó a Barranquilla por problemas de salud. En una llamada corta por la mala señal, Castillo la felicitó por el logro obtenido en la justa.
"Al principio me sirvió que hice muchos puntos de colchón para seguir en la competencia y ese penúltimo tiro fue bastante acertado porque sabía que ya tenía segura la de Oro", narró respecto al penúltimo disparo que la sorprendió al ver la marca justamente en el centro. Así dejó sin posibilidades a Zavala.
Los nervios la invadieron desde el comienzo de la jornada, sin embargo, se portó como toda una experta y acumuló la mayor cantidad de puntos para colocarse siempre arriba.
Karen estaba colocada en la mesa B y Alejandra en la D, ambas cercanas, pero lejanas al convertirse en rivales por las preseas. La experimentada en la modalidad se vio concentrada y unos audífonos la aislaron un poco, mientras que Karen no portó nada para aislarse del rudio y escuchó cada porra, grito y suspiro de los asistentes.
En los momentos de presión, la joven comenzaba a cantar fragmentos de algunas canciones, sus labios la delataron murmurando las piezas que se le vinieron a la mente previo a colocar la pistola y disparar.
"Es mucho nervio y mucha presión tener a todos ahí porque tienes que dar un resultado, pero también es la emoción y el disfrute de que estás haciendo algo que te gusta y demostrando lo que todos los días entrenas. Es una combinación que hace que sientas todo muy movido (el estómago)".
Una vez definido todo, celebró con un fuerte abrazo de Zavala e inmediatamente tomó el celular. Del otro lado estaba Alfredo Castillo, director de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte para felicitarla; el directivo no viajó a Barranquilla por problemas de salud. En una llamada corta por la mala señal, Castillo la felicitó por el logro obtenido en la justa.