Atletas que a pesar de tenerlo todo, han caído en depresión
Tras el crudo y revelador anuncio de la tenista, Naomi Osaka, hacemos un recuento de otros deportistas que han pasado por una situación similar.
Regularmente los deportistas de alto rendimiento parecen tener una vida de ensueño fuera de las canchas o de la disciplina a la que se dedican. Lujos, dinero, comodidades, viajes, nulas carencias, etc. Sin embargo, con el paso de los años han ido aumentado los casos de atletas que han aceptado haber caído en alguna especie de depresión que los han orillado a problemas de salud, al retiro y en algunos casos más extremos, hasta la muerte.
La última de ellas fue Naomi Osaka, la tenista cuatro veces campeona de un Grand Slam en la WTA, que el domingo pasado anuncio su baja de Roland Garros, debido a que no está óptima en su salud mental y bienestar emocional
"La verdad es que he sufrido largos episodios de depresión desde el US Open en 2018 y me ha costado mucho lidiar con eso. Me pongo muy nerviosa y me resulta estresante siempre tratar de involucrarme y dar las mejores respuestas que puedo. Voy a tomarme un tiempo fuera de la cancha ahora", expresó la japonesa.
Es por eso que en Mediotiempo echamos una mirada al pasado y recordamos a otros personajes ligados al deporte, que también han sufrido este tipo de problemas.
Morro García
Uno de los mejores delanteros del futbol sudamericano. Santiago García reconoció en 2018 padecer constantes lapsos depresivos por situaciones extracancha que le habían afectado en su vida personal e inevitablemente en su carrera.
Por desgracia, en febrero del 2021 su cuerpo fue encontrado sin vida en un apartamento de la provincia de Mendoza en Argentina.
Michael Phelps
Así es, uno de los atletas más grandes en la historia, multicampeón olímpico, una leyenda viva, también reconoció su depresión. En especial, al finalizar cada una de las justas olímpicas a las que asistió.
Dijo pasar muchos días encerrado en su habitación e incluso su pareja habló públicamente, dando a conocer el mal estado mental de Phelps y su miedo a que el nadador se podría quitar la vida en cualquier momento.
Andrés Iniesta
Por increíble que parezca, uno de los mejores futbolistas de la historia, pasó un buen tiempo de sus momentos de más gloria, sumido en depresión y problemas emocionales, que poco se notaron en la cancha, pero que en cuestión personal, lo llevaron al extremo.
El Manchego habló en un documental que durante 2009 y después de la muerte de su amigo, el futbolista, Dani Jarque, sufrió mucho, al borde de alejarse de su familia y entorno cercano. Una vez acabado de entrenar o de los juegos, Andrés lo único que quería era ir a dormir y recordar al fallecido.
Pep Guardiola y los psicólogos del Barcelona lo ayudaron a salir de la crisis.
Robert Enke
El 10 de noviembre de 2009, el entonces guardameta del Hannover, se arrojó a las vías del tren, acabado así con vida a los 32 años.
Diferentes situaciones como la pérdida de su hija a los 2 años en 2006 y un trauma psicológico que jamás pudo superar, lo llevaron al suicidio.
Enke era el guardameta suplente de la Selección Alemana y semanas antes de su muerte, había adoptado una niña junto a su pareja.
Ian Thorpe
El nadador australiano, quíntuple campeón olímpico, reveló en 2016 que luchaba contra una depresión desde la adolescencia y que incluso en 2014 fue hospitalizado después de que le encontraran errante y desorientado en una calle de Sídney.