Canelo Álvarez y la vez que estuvo cerca de ser noqueado ¡en el primer round!
En 2010, el mexicano libró uno de los primeros asaltos más complicados que ha tenido a lo largo de su carrera, pero aguantó el vendaval de José Miguel Cotto.
Pocos han sido los boxeadores que han podido exhibir en algún momento a Saúl Álvarez a lo largo de su carrera deportiva. Y es que la calidad del Canelo es más que evidente arriba del ring, ya que de las 59 peleas que ha disputado hasta el momento, ha ganado 56, empatados dos y perdido una.
Incluso, en la pelea que perdió ante Floyd Mayweather, jamás estuvo en riesgo de ser noqueado, pues el estadounidense se terminó llevando el triunfo por decisión unánime.
Sin embargo, el único boxeador que ha podido presumir hasta el momento haber puesto en malas condiciones al Canelo Álvarez en una pelea oficial, es el puertorriqueño José Miguel Cotto (hermano de Miguel Cotto), en una pelea que sostuvieron en 2010 y en la que estuvo a nada de mandar a la lona al mexicano ¡en el primer round!
La contienda se celebró un 1 de mayo de 2010, con un Canelo Álvarez con 20 años de edad y listo para llevarse la pelea semiestelar del MGM Grand de Las Vegas; ahí, el tapatío llegaba con un récord de 32 triunfos y un empate.
La contienda empezó con un José Miguel Cotto que salió a 'comerse' al mexicano, ya que no habían pasado ni dos minutos del primer asalto cuando el puertorriqueño tiró tremendo gancho de izquierda en la quijada del Canelo que lo hizo tambalear, incluso se tuvo que recargar en las cuerdas para no caer, al tiempo que recibía el castigo del rival.
Sin embargo, el mexicano libró el primer asalto y después del segundo demostró de qué estaba hecho, pues conectó con un ‘uppercut' a José Miguel Cotto y lo mandó a la lona; desde ese momento, el Canelo tomó el control de la contienda.
La batalla transcurrió en los asaltos siguientes, donde el tapatío repartió candela tanto en el cuerpo como en el rostro del rival, hasta que finalmente en el noveno round el referee decidió parar la pelea ante la nula respuesta de José Miguel Cotto, consumándose así el triunfo mexicano, quien logró sobrevivir al vendaval del primer asalto.