El día que JC Chávez amenazó al Zar Aguilar por un comentario que malinterpretó
El Zar tiene una gran relación con el campeón, dice que es su 'maestro' por cómo se alejó de las drogas, pero antes le tocó sufrir su peor versión.
Carlos "el Zar" Aguilar convivió con la peor versión de Julio César Chávez, esa en la que la droga y la sinrazón gobernaba a la leyenda del boxeo mexicano, en la etapa en la que ambos compartieron micrófonos en el proyecto pugilístico de TV Azteca.
Pasados los años, el ahora comentarista de TUDN recuerda con nostalgia lo que vivieron de la mano, a pesar de que algunos de los capítulos no fueron gratos y estuvieron llenos de tensión por las locuras del campeón, uno de los cuales se animó a relatar.
"Sentado en la mesa de transmisiones estábamos transmitiendo y Julio dijo 'no, Carlitos, en esta va a ganar tal, el rojo'... ¡y gana la pelea el rojo!", recordó Aguilar en entrevista con Toño de Valdés, previo a demostrar la peor versión de Chávez.
"Le digo al champ: 'eres prestidigitador', entonces agarra, se me voltea y dice 'a mí no me dices puto, cabrón', porque él estaba ido", añadió con una risa nerviosa.
"Le digo 'no, champ, tranquilo' y me responde: 'me vuelves a decir así y te voy a mandar a matar'... Yo agarraba y decía ¡en la torre! Estaba en su momento más complicado", complementó.
Un maestro para el Zar
No obstante esos malos momentos, Aguilar se quedó con la última versión del campeón, la que tiene ya 12 años sin probar una pizca de cocaína y que ha tratado de reconstruir su vida. Las tentaciones abundan, le tocó verlo de primera mano, pero ya no hay cabida en el mundo Chávez.
"Es mi maestro porque recae, regresa a la clínica y cuando vuelve es tolerante, tranquilo, le gusta leer, le gustan los espacios de reflexión... Los últimos 12 años están llenos de eso y en lo personal me da gusto", abundó el periodista.
EL Zar señaló que le tocó ver como en cada sitio que pisaban llegaban hasta 20 personas que le acercaban la droga y a quienes solo les agradecía el gesto, sin más. Fuerza de voluntad que lo maravilla, más porque él lo vio hundido.
"Lo más que me dijo fue: 'te agradezco por tu tolerancia y lo mucho que me quisiste para mantenerme en este proyecto que es mi vida'. Es una forma de alejarse de la droga. Le tengo un cariño enorme".