La discapacidad no existe para los héroes del Maratón CDMX
El Monumento a la Revolución vivió una fiesta desde antes del amanecer por el Maratón de la CDMX.
No hay discapacidad que detenga a los grandes héroes del Maratón de la CDMX, porque más allá de medallas o récords, ellos corren para demostrar que los límites no existen.
El Monumento a la Revolución vivió una fiesta gracias a los miles de corredores involucrados en el Maratón, pero aquellos que escucharon las palmas más fuertes son los ejemplos de vida que en silla de ruedas o con ceguera, demostraron que la mente es más poderosa que nada.
Los primeros en aparecer en el Monumento, pasadas las 8:00 horas, fueron los hombres que a bordo de su silla de ruedas rodaron dejando hasta la última gota de sudor.
Más tarde se vio a Duncan Maiyo y Vivian Kiplagat, el rey y reyna de la élite, pero por detrás llegaron los semiprofesionales, los amateurs y entre ellos algunos competidores ciegos que, acompañados de un guía, agradecieron la ovación.
Por supuesto que hubo espacio para los participantes curiosos: uno disfrazado de azteca, otro de vaca, algunos con la bandera de México en lo alto y hasta algunos perros acompañando a sus dueños en este maratónico día.