¿Por qué los corredores kenianos son los mejores del mundo?
Los corredores nacidos en África desarrollan y perfeccionan habilidades que los llevan a ser casi invencibles en las carreras de larga distancia.
Kenia es la cuna de los mejores corredores de larga distancia del mundo. Hechos recientes comprueban esta afirmación: Lawrence Cherono y su compatriota, la corredora Brigid Kosgei, se impusieron en el reciente Maratón de Chicago. Kosgei incluso rompió la marca mundial femenil de maratón.
Un día antes, Eliud Kipchoge se convirtió en el primer hombre en correr la distancia del maratón por debajo de las dos horas. Los tres son kenianos y no son los únicos nacidos en esa nación que han obtenido tiempos impresionantes.
Esto nos lleva a preguntarnos, ¿por qué los corredores nacidos en Kenia son los mejores del mundo? ¿Cómo logran que su cuerpo tenga la resistencia suficiente para hacer distancias largas en tan corto tiempo? Existen muchas causas, algunas realmente sorprendentes, que los llevan a dominar esta disciplina.
La altura de Nairobi
Nairobi es la capital de Kenia, situada a mil 600 metros sobre el nivel del mar. El Valle del Rift, lugar de donde procede la gran mayoría de los corredores kenianos, se encuentra a una altura de mil 220 metros sobre el nivel mar. Esto provoca que desde que el feto se encuentra en el útero, esté más protegido y reciba más sangre a su arteria uterina, lo cual se traduce en una mayor capacidad cardiovascular al hacer ejercicio.
Ejercicio a temprana edad
Al carecer de los medios económicos suficientes para tener lujos como una consola, un celular o un televisor en el hogar, los niños de la gran mayoría de las familias en Kenia, que suelen vivir en situaciones precarias, salen a jugar a las calles, desarrollando una condición física mucho más saludable y fuerte, totalmente alejados del sedentarismo. Eso los lleva a que su cuerpo esté apto para las exigencias físicas del atletismo.
Un físico apto para el running
Basta observar el físico de los corredores kenianos (sumamente delgado) para darse cuenta que no tienen que soportar un gran peso, lo cual facilita su desplazamiento para hacerlo más ligero y veloz.
El medio geográfico de Kenia les ayuda… y mucho
Kenia es un lugar donde las carreteras y los caminos ni siquiera están pavimentados, lo mismo ocurre con las pistas de entrenamiento. Estas irregularidades les ayudan a entrenarse bajo condiciones geográficas de mayor exigencia, fortaleciendo su cuerpo al máximo.
El running es un estilo de vida para ellos
En Kenia abundan los training camps, lugares de concentración donde los corredores viven para entrenar a veces hasta tres veces al día. Ahí también duermen, comen y hasta colaboran en labores sociales como limpieza, mantenimiento y cocina. Estos centros de entrenamiento se llenan de jóvenes que aspiran a llegar a convertirse en corredores de élite para competir por el mundo y hacerse de un nombre.
¿Y la genética?
Parece ser que este aspecto también influye para que requieran menor esfuerzo al correr: el investigador danés Bengt Saltin demostró que los cuádriceps de los corredores kenianos concentran mayor cantidad de enzimas -moléculas relacionas con la manera en que se administra la producción de energía-, mitocondrias y más vasos sanguíneos musculares, lo cual se traduce en un menor desgaste muscular.
Los kenianos entrenan con un solo objetivo: ganar
La situación económica en Kenia es tan complicada como en la mayoría de los países africanos. Los corredores keniatas salen de su nación pensando en ganar cuanta carrera puedan hacer en diversos países del mundo para obtener dinero y enviarlo de vuelta a sus familias. Es decir, el atletismo se vuelve un medio de subsistencia para salir adelante.