Desde falta de compromiso, un estratega que nunca tuvo un proyecto a largo plazo, un personaje que carecía de la preferencia del medio futbolístico en Costa Rica, estos y otros conceptos han sido parte en las últimas horas para entender la renuncia del técnico uruguayo Gustavo Matosas a la selección costarricense.
Matosas Paidon quien fue elegido como el responsable del destino del seleccionando tico en octubre de 2018, llegó a se cargo después de que los dirigentes de ese futbol centroamericano se decantaron por él, más por una cuestión económica que deportiva.
Gustavo era una de las cinco opciones que sondearon, otro fue el mexicano Víctor Manuel Vucetich, pero sus altas pretensiones salariales derrumbaron las ilusiones de las dirigentes costarricenses por contratarlo y después de descartar por las mismas razones financieras a los otros tres candidatos.
Finalmente, Gustavo Matosas, quien se vendió como un excelente conocedor del futbol de Costa Rica, fue asesorado por un amigo suyo que vive en ese país, respecto a ciertos jugadores y planteles. Así fue como logró convencer al presidente del futbol tico, Rodolfo Villalobos.
Pero también cerró un contrato con un salario que rondaría los 45 mil dólares mensuales, quizá una cantidad menor a la que estaba acostumbrado a percibir el entrenador, sobre todo en sus últimos clubes en el futbol mexicano, de donde se marchó señalado y con la supuesta sentencia de que no volvería a trabajar en este mercado.
Matosas y Villalobos sellaron una alianza que careció de solidez, percepción que se tiene en el medio costarricense, donde también se piensa que esta renuncia ya estaba pactada por cuestiones políticas y electorales en las pasadas elecciones de la federación de esa nación, y donde Rodolfo logró un mandato más, con la ayuda del mismo entrenador, quien habría sido utilizado como un elemento de cabildeo.
Ahora el entrenador uruguayo parece estar entrampado en esta penosa situación, que hace pensar que el club San Luis podría recular en su interés por contratarlo, aunque se estima que estaría arribando a nuestro país el próximo fin de semana.
SIBOLDI
Se ha mantenido en un perfil bajo ante los rumores que lo colocan como una de las opciones para dirigir a Cruz Azul en lugar del portugués Pedro Caixinha; el estratega uruguayo ha pasado toda la semana en su residencia en la Ciudad de Monterrey, y en reiteradas ocasiones ha señalado que nadie le ha llamado.
Otro de los hombres que levantó mediáticamente la mano, es Juan Francisco Palencia quien se estima llegara a México a inicios de la próxima semana, aunque tampoco ha sido contactado, se supone por algún miembro de la directiva de Cruz Azul.